Bubo capensis

Bubo capensis Smith, 1834 ssp. mackinderi Sharpe, 1899

Verano-2005.
Cautividad. Europa, España, Comunidad Valenciana, Castellón, entre Peñíscola y Benicarló, en una finca particular.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Aves.
Orden: Strigiformes.
Suborden: Strigi.
Familia: Strigidae.
Subfamilia: Striginae.
Género: Bubo.
Especie: Bubo capensis.

El búho del Cabo puede medir hasta sesenta y un centímetros de longitud, y un metro y veinticinco centímetros de envergadura alar. Tras el búho de Verreaux (Bubo lacteus), es el mayor búho de África. Se caracteriza por un plumaje más moteado que listado, algo especialmente notable en el pecho y vientre, lo que le diferencia con facilidad de otros búhos similares. Los laterales del pecho están parcheados de pardo oscuro y el pecho, más pálido, está adornado por marcas blancas, negras y leonadas. El disco facial es pardo leonado, con un borde negro o pardo oscuro que se vuelve más ancho hacia el cuello; sus ojos son anaranjados, el fuerte pico curvado es de color córneo oscuro con la cera gris, y sobre la cabeza posee sendos prominentes mechones de plumas o "cuernos" de color negro con bordes claros. La garganta es clara. La corona es de leonada amarillenta a pardo grisácea, densamente moteada de negro. El dorso es pardo oscuro con moteado blanquecino, negro y leonado. Las banderas externas de las plumas escapulares poseen grandes zonas blancas con motas oscuras, formando una hilera poco definida a través del hombro. Las coberteras alares poseen grandes manchas blancas que forman una barra blanquecina visible en el ala cerrada. Las rémiges y rectrices están barradas de pardo claro y oscuro. La cola mide de quince a veintiséis centímetros de longitud. Las patas están densamente emplumadas hasta el dorso de los dedos, con las plumas de color pardo, la planta de las patas está desnuda de plumas y es amarillenta. Las garras son curvadas y poderosas, de color negro.

Se extiende por gran parte del este y sur del continente africano, desde el Cuerno de África hasta la región del Cabo, pero de forma discontinua, dividiéndose en tres subespecies. Es un ave adaptable que puede encontrarse desde los bosques húmedos hasta los desiertos, pasando por sabanas y matorrales, pero tiene preferencia por lugares montañosos con abundantes roquedos, desde el nivel del mar hasta los dos mil quinientos metros de altitud. Es de actividad nocturna y durante el día se refugia en grietas rocosas, repisas abrigadas y pequeñas cuevas, o incluso, si no encuentra mejor refugio, en árboles o bajo un matorral en el suelo. Se alimenta de pequeños y medianos mamíferos y aves, hasta del tamaño de una pintada o un damán. El macho marca su territorio mediante su sonido ululante. Durante el cortejo, el macho hace bruscas reverencias con la cabeza y emite un sonido especial enfrente de la hembra que permanece erecta y silenciosa. El nido se sitúa en un hueco somero, una cornisa abrigada, una grieta rocosa, una pequeña cueva o incluso directamente en el suelo bajo un matorral denso. No reviste el nido con ningún material, sino que la hembra deposita directamente en el lugar elegido sus entre uno y tres huevos blancos, que miden unos cinco centímetros y medio de longitud y cuatro y medio de anchura. La hembra los incuba sola, durante unas cinco semanas, mientras que el macho se encarga de cazar presas y traérselas a su compañera. Los polluelos son alimentados por la hembra con trozos de carne de las presas que trae el macho. Salvo en las ocasiones en las que el alimento es muy abundante, lo habitual es que el polluelo más pequeño muera de inanición. A las tres o cuatro semanas, la hembra deja de permanecer en el nido por la noche, y sólo acude para dormir junto a su progenie durante el día. Los jóvenes comienzan a explorar los alrededores del nido hacia los cuarenta y cinco días, y pueden volar a las siete u ocho semanas de nacer. Se independizan totalmente a los seis meses, y alcanzan la madurez sexual al siguiente año.