Buteo galapagoensis

Buteo galapagoensis (‎Gould‎, ‎1837‎)

27-Julio-2019.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, Nueva Inglaterra, Massachusetts, Suffolk, área metropolitana de Boston, Cambridge, Campus de la Universidad de Harvard, Museo de Historia Natural de Harvard.
Leg: Isidro Martínez. Det: Harvard Museum of Natural History.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Aves.
Orden: Accipitriformes.
Familia: Accipitridae.
Subfamilia: Buteoninae.
Género: Buteo.
Especie: Buteo galapagoensis.

El ratonero de las Galápagos es una especie grande para su género, tiene una envergadura alar de un metro y treinta centímetros y una longitud de unos cincuenta y cinco centímetros, siendo los machos claramente más ligeros que las hembras. Presenta amplias alas redondeadas y una ancha cola con forma de abanico, como es típico de su género. Su pluma es de color pardo a casi negro, moteados irregularmente de blanquecino, especialmente en las alas y el dorso. Las rémiges y las rectrices están transversalmente rayadas de marrón y blanquecino. Los ojos son marrones, las patas son amarillas y el pico es negro con la cera amarilla. Los juveniles se diferencian de los adultos por estar más densamente moteados de blanco y tener una tonalidad más clara, especialmente en el pecho.

Es endémico de las Islas Galápagos, donde las poblaciones se dividen altitudinalmente: los ejemplares reproductores y las crías que no están totalmente independizadas habitan en las zonas bajas y costeras, ricas en recursos, mientras que los juveniles recién emancipados son expulsados y deben vivir en las zonas altas de las islas. Se considera una especie vulnerable: existen sólo unas doscientas parejas reproductoras, y desde los años setenta ha desaparecido de cinco de las islas, y la población de la isla de Santa Cruz se ha reducido, otras poblaciones en cambio se mantienen estables. La persecución directa, que continúa ilegalmente hoy en día, es su mayor amenaza. Dado que no existen grandes depredadores en estas islas, es el mayor depredador en ellas y se sitúa en la cúspide de la cadena alimentaria terrestre. Se alimenta de reptiles, peces y huevos de tortugas marinas, y en menor grado, de polluelos y huevos de aves marinas. También aprovecha la carroña, y a menudo se acerca a campamentos humanos para aprovechar los restos de comida. Presentan un peculiar modo de caza cooperativa, inusual entre las rapaces cazadoras y más propio de los buitres. Los pequeños grupos familiares vuelan manteniéndose a la vista unos con otros, hasta a doscientos metros de distancia entre ellos, cuando uno ve una presa, avisa a los demás miembros y el ejemplar más dominante come primero mientras los demás esperan su turno. Su biología reproductiva es muy curiosa: en algunas de las islas, forma parejas monógamas como la casi totalidad de las aves rapaces, pero en otras (Isabela, Marchena y Pinta), cada hembra se aparea con entre dos y ocho machos que forman un grupo territorial. Esto se debe a que existen muchos más machos que hembras (cinco veces más machos que hembras). Construye su nido en ramas bajas de matorrales o directamente en el suelo volcánico, algo bastante inusual para un ratonero. Aprovechan el mismo nido cada año, añadiendo nuevo material en cada temporada, por lo que acaban adquiriendo un gran volumen, de hasta un metro y veinte centímetros de diámetro y tres metros de altura. La hembra pone entre uno y tres huevos de color blanco verdoso. En las poblaciones poliándricas, todos los machos constribuyen a cuidar y alimentar a los polluelos de su hembra. Alcanza la madurez sexual a los tres años, y puede vivir hasta veintidós años.