Chrysococcyx caprius

Chrysococcyx caprius Boddaert, 1783

3-Agosto-2017.
Cautividad. Europa, Alemania, Renania del Norte-Westfalia, Bonn, Museo de Investigación Zoológica Alexander König.
Coordenadas: 50°43′19″N, 7°06′49″E.
Leg: Isidro Martínez. Det: Museum König.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Aves.
Orden: Cuculiformes.
Suborden: Cuculi.
Superfamilia: Cuculoidea.
Familia: Cuculidae.
Subfamilia: Cuculinae.
Género: Chrysococcyx.
Especie: Chrysococcyx caprius.

El cuco dídrico es un pequeño cuclillo de unos diecinueve centímetros de longitud. Sus partes dorsales son de color verde oscuro metalizado en los machos, y tendiendo más a cobrizas en las hembras, ambos sexos poseen marcas blancas en la parte alta de la cabeza (una pequeña delante de cada ojo, una alargada que nace detrás del ojo y sube hacia la nuca, y una en lo alto de la frente), un moteado blanco en las alas (con tres o cuatro motas blancas en la bandera interna de cada rémige, y motas blancas en las coberteras) y barras transversales blancas en la cola. Las partes inferiores son blancas en el macho, con un corto barrado transversal verde cobrizo en la parte alta de los flancos, mientras que en la hembra, el barrado transversal blanco y cobrizo es mucho más extenso, ocupando toda la zona ventral, además las zonas blancas tienen un leve tinte leonado. Ambos sexos poseen los ojos de vivo color rojo, un pico fino negro puntiagudo, algo curvado hacia abajo, y pequeñas patas negras. Los ejemplares juveniles de ambos sexos se distinguen de los adultos por su pico anaranjado, sus ojos grises, su garganta moteada y el color leonado de las motas claras de las rémiges y rectrices.

Se halla muy ampliamente distribuido por todo el continente africano al sur del Sáhara (excepto en el Cuerno de África), así como en el sur de la Península Arábiga. Es un ave solitaria, bastante adaptable, y aparece en bosques abiertos, sabanas arboladas, matorrales, plantaciones, jardines e incluso desiertos, desde el nivel del mar hasta los dos mil cuatrocientos metros de altitud. Las orugas constituyen la mayor parte de su dieta, pero también consume otros insectos y excepcionalmente, huevos de pequeñas aves o semillas. Los machos emiten regularmente un sonoro reclamo de cuatro notas, de cuya onomatopeya deriva su nombre común. Como la mayoría de los cucos, es un parásito de nidos, que pone sus huevos en los nidos de tejedores y obispos (familia Ploceidae), librándose de este modo de las tareas de incubación y cuidado de su prole, que correrán a cargo de sus padres adoptivos. Las hembras esperan pacientemente a que el legítimo dueño del nido abandone éste y entonces entran para inspeccionarlo, si es adecuado lanzará los huevos de sus hospedadores fuera del nido y pondrá uno solo (muy raramente dos) en su lugar, hasta completar los hasta veinticuatro huevos que pone en toda la temporada de cría, uno en cada nido y hasta cinco al día. A veces, los pájaros a los que parasita la descubren antes de que pueda abandonar el nido, picoteándola hasta matarla, sobre todo si se queda atascada en la estrecha entrada del nido. También persiguen al macho y ha habido casos de ataques mortales por parte de los pequeños pájaros granívoros. Si algún huevo legítimo ha quedado dentro del nido, el polluelo del cuco dídrico, que nace antes, lo devorará durante sus primeros días de vida. Permanece en el nido durante unas tres semanas, alimentado por sus padres adoptivos, y permanecerá junto a ellos, fuera del nido, otras tres semanas más, pasadas las cuales se independizará.