Butia eriospatha

Butia eriospatha (Martius ex Drude, 1881) Beccari, 1916

23-Marzo-2015.
Cautividad. Europa, España, Islas Canarias, provincia de Santa Cruz, Tenerife, Valle de la Orotava, Puerto de la Cruz, Calle Retama, Jardín de Aclimatación "La Orotava".
Leg: Isidro Martínez. Det: Botánico de la Orotava.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Spermatophyta.
Clase: Liliopsida.
Orden: Arecales.
Familia: Arecaceae.
Subfamilia: Arecoideae.
Género: Butia.
Especie: Butia eriospatha.

Esta es una palmera de crecimiento lento que mide hasta seis metros de altura en estado salvaje y algo más en cultivo, con un tronco solitario, largo y recto de color gris, de hasta medio metro de diámetro, en cuyo extremo superior se conservan durante mucho tiempo las bases de los peciolos, formando una especie de cabezuela al igual que en las restantes especies del género. Las hojas son muy arqueadas, tendiendo a péndulas, miden unos dos metros de longitud y poseen cerca de medio centenar de foliolos a cada lado, de hasta ochenta centímetros de longitud y dos y medio de anchura, con una coloración verde grisácea. La inflorescencia, muy ramificada y de hasta un metro de longitud, posee una espata recurvada, de hasta ciento treinta centímetros de longitud y quince de anchura, recubierta de pelos lanosos marrones, lo que permite distinguir a esta especie de la muy similar Butia capitata, cuya espata es glabra. Esto también da el nombre a la especie, ya que eriospatha significa "con espata lanosa". Las flores son unisexuales pero ambos sexos se encuentran en la misma inflorescencia. Las flores femeninas miden de tres a cinco milímetros de longitud y similar diámetro, las masculinas van de de cuatro a ocho milímetros de longitud siendo más grandes las que están en la parte basal de la inflorescencia. Sus frutos miden unos dos centímetros de diámetro y son subesféricos con un pequeño pico, comestibles, de sabor dulce, y de color amarillo a rojo al madurar, conteniendo entre una y tres semillas.

Es una especie propia del extremo sureste de Brasil (estados de Rio Grande do Sul, Santa Catarina y Paraná) y del nordeste de Argentina, donde habita en pastizales abiertos y en bosques de Araucaria a entre setecientos y mil doscientos metros de altitud. Se trata de una especie amenazada de extinción, catalogada como Vulnerable, a causa de la destrucción de su hábitat natural. Es la más resistente y la de crecimiento más rápido de todo el género Butia, aun así es muy rara en cultivo.