Elaphe longissima

Elaphe longissima (Laurenti, 1768)
Sinónimo: Zamenis longissimus (Laurenti, 1768)

21-Junio-2008.
Europa, España, Aragón, Huesca, Prepirineos, Hoya de Huesca, Las Peñas de Riglos, Santa María - La Peña, Embalse de La Peña, al lado de una vía de tren.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Reptilia.
Orden: Squamata.
Suborden: Ophidia.
Familia: Colubridae.
Subfamilia: Colubrinae.
Género: Elaphe.
Subgénero: Zamenis.
Especie: Elaphe longissima.

La culebra de Esculapio es una serpiente larga y esbelta, de hasta dos metros de longitud, una de las más grandes de Europa, especiamlmente los machos, que son notablementa más grandes que las hembras. Su piel es un color variable, usualmente oliváceo bronceado, con un tono más anaranjado en parte inferior de la cabeza, la zona ventral es amarilla sin manchas. Los ojos son de color ambarino. Los juveniles tienen una serie de marcas oscuras en el dorso y la cabeza, que se van difuminando hasta desaparecer en los adultos.

Su área de distribución abarca el centro-sur de Europa: los Pirineos, la mayor parte de Francia, Italia y el este de Europa, alzancando al norte hasta el extremo sur de Polonia y al este se fragmenta en poblaciones aisladas en Asia Menor. Se divide en tres subespecies: la nominal que ocupa la mayor parte de su rango, la subespecie Elaphe longissima romana propia del sur de Italia y Sicilia, y la subespecie Elaphe longissima persica de Asia Menor. En Inglaterra, donde habitó en tiempos prehistóricos durante los periodos interglaciales, no es nativa, pero dos poblaciones escapadas de zoos se han estabilizado desde hace tiempo.

Habita en colinas cálidas y áreas rocosas húmedas, con vegetación variada y abundancia de microclimas diferentes que ayudan a la serpiente a controlar su temperatura viajando de un lugar a otro. Evita las áreas abiertas y los terrenos agrícolas, pero puede encontrarse en áreas perturbadas por el hombre si tienen la cobertura adecuada. Es casi la única serpiente europea que puede encontrarse en bosques densos y sombríos. Se alimenta principalmente de roedores y otros pequeños mamíferos, en menor grado de aves. Carece de veneno. Es activa durante el día, y es una excelente escaladora, pasando tanto o más tiempo en los árboles y muros que en el suelo. Las escamas enquilladas de la parte inferior de sus flancos le ayudan a trepar muy bien.

Durante la época de reproducción, en primavera, los machos pueden viajar hasta dos kilómetros para encontrar hembras. Los machos rivales se enfrentan en una lucha ritualizada para ver quién es el más fuerte, el ganador consigue a la hembra con la que baila tambén de forma ritual, con las colas enroscadas y la parte anterior del cuerpo que adopta una postura en forma de S. Unas semanas tras la cópula, la hembra pone hasta veinte huevos en un lugar donde abunde la materia orgánica en descomposición, como un tocón podrido o bajo una pila de heno. Las crías al nacer miden treinta centímetros.

La culebra de Esculapio ha sido importante parte de la mitología griega, que se ha transmitido hasta nuetros días en, por ejemplo, el símbolo de la farmacia y la medicina: una serpiente enrollada alrededor de, respectivamente, una copa y un bastón. Esta serpiente simbólica está basada originalmente en Elaphe longissima. No es una especie amenazada, pero sus poblaciones están en regresión debido a las molestias humanas y el desarrollo agrícola y urbanístico, en algunas partes de su área de distribución se encuentra en serio peligro.