Gazella spekei

Gazella spekei (Blyth, 1863)

2-Julio-2016.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, California, San Diego, Parque Balboa, Zoo de San Diego, Northern Frontier, Park Way.
Leg: Isidro Martínez. Det: Zoo de San Diego.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Synapsida.
Orden: Artiodactyla.
Suborden: Ruminantia.
Superfamilia: Bovoidea.
Familia: Bovidae.
Subfamilia: Antilopinae.
Género: Gazella.
Especie: Gazella spekei.

La gacela de Speke es la más pequeña de todas las especies del género Gazella, con una longitud de alrededor de un metro (más veinte centímetros de cola), hasta sesenta centímetros de altura hasta la cruz, y un peso de hasta veinticinco kilos. Las partes superiores de su pelaje son de color leonado, y están separadas de las partes inferiores blancas por una amplia banda negruzca que recorre los flancos. La cabeza también es de color leonado, con marcas blanquecinas y oscuras formando un patrón distintivo. Destaca especialmente su cámara nasal dilatable, que le hace tener de tres a cinco pliegues fruncidos en la parte superior del morro. Usa esta cámara de resonancia, que puede inflarse hasta alcanzar el tamaño de un puño, para emitir sus sonidos de alarma, incrementando su volumen. Esta cámara de resonancia es exclusiva de esta especie y permite distinguirla de otras gacelas. Sus cuernos son ampliamente anillados (más marcadamente en los machos). Los cuernos del macho miden hasta veintinueve centímetros de longitud y se curvan hacia atrás en una forma de S abierta, siendo los de las hembras más cortos, finos y rectos, de hasta veinticinco centímetros de longitud. En el trasero, debajo de la cola (que es negra), posee un gran parche blanco. Las patas son leonadas por su cara externa y blancas por la interna. En ocasiones se ha considerado como una simple subespecie de Gazella dorcas, pero casi todos los autores la aceptan como una especie separada.

Es endémica del Cuerno de África, donde habita en matorrales pedregosos, estepas herbosas y semidesiertos. Antiguamente bien extendida por toda la región, hoy en día está limitada a las llanuras costeras de Somalia, siendo ocasional en el nordeste de Etiopía, de donde ha sido exterminada por la caza incontrolada. La grave fragmentación de su hábitat natural por la expansión urbana y agrícola ha dañado gravemente los hábitos migratorios o nomádicos de la especie, aislando a unas poblaciones de otras. Pero su mayor amenaza es la competencia con el cada vez más numeroso ganado doméstico, que deja sin recursos a los rumiantes salvajes. Se considera como una especie en peligro de extinción. Como adaptación a las regiones tórridas donde habita, esta gacela se alimenta al amanecer y al anochecer, y descansa en las horas calurosas del día. Hacia el mes de mayo, la aparición de grandes masas de tábanos fuerzan a estas gacelas a trasladarse a las dunas costeras, donde los vientos marítimos dispersan a estos molestos insectos. Las manadas de estas gacelas son bastante pequeñas, con entre cinco y doce ejemplares (ocasionalmente más, si el alimento es abundante). Hay dos tipos de manadas: las formadas únicamente por machos jóvenes que aún no tienen harén, y las formadas por un solo macho adulto, fuertemente territorial, y las hembras con sus pequeños. El macho delimita su territorio con orina, excrementos y secreciones de la glándula que posee delante de los ojos. Las cópulas tienen lugar en diciembre y enero, y la hembra pare una sola cría en mayo o junio, tras cinco meses y medio de gestación. Las crías permanecen inmóviles, ocultas entre las hierbas y confiando en su camuflaje para evitar a los depredadores, sólo se mueven de allí lo necesario para mamar. Son destetadas a los dos o tres meses. Las hembras maduran sexualmente a los nueve meses y los machos tardan el doble de tiempo en alcanzar la madurez sexual. Pueden vivir hasta doce años.