Ferocactus histrix

Ferocactus histrix (De Candolle, 1828) G. E. Lindsay, 1955

9-Mayo-2015.
Cautividad. Europa, España, Madrid, Corredor del Henares, Alcalá de Henares, Campus de la Universidad de Alcalá, Real Jardín Botánico Juan Carlos I.
Leg: Isidro Martínez. Det: Botánico de Alcalá.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae
Filum: Spermatophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Caryophyllales.
Familia: Cactaceae.
Subfamilia: Cactoideae.
Género: Ferocactus.
Especie: Ferocactus histrix.

Es un cactus solitario con un tallo globoso, o a veces cortamente columnar, pudiendo alcanzar hasta setenta centímetros de altura y treinta de diámetro. El tallo es de color verde azulado o grisáceo y está surcado por hasta veinticinco costillas agudas, de hasta dos centímetros de altura y levemente tuberculadas. Las aréolas ovaladas se sitúan a entre dos y cuatro centímetros de sus vecinas, las aréolas mas jóvenes poseen una densa lanosidad amarilla que con la edad se vuelve gris y luego desaparece. Cada aréola posee de una a cuatro espinas centrales de hasta seis centímetros de longitud, y de siete a doce espinas radiales de hasta cuatro centímetros de longitud y más finas que las radiales, ambos tipos de espinas son de sección cilíndrica y de color pajizo, sin punta ganchuda. En verano, produce pequeñas flores amarillas con forma de embudo, de dos centímetros y medio de diámetro. Sus frutos son comestibles.

Es una especie endémica de México, ampliamente distribuida en los estados de Guanajuato, Puebla, Hidalgo, Guerrero, Aguascalientes, Durango y Zacatecas. Crece preferentemente en las altiplanicies, pudiendo verse a entre mil doscientos y dos mil seiscientos metros de altitud en zonas de matorral xerófilo, bosques de encino y matorral de montaña. Su población ha disminuido notablemente en las últimas décadas y ahora se considera como una especie Casi Amenazada, que se enfrenta, por un lado, a la degradación del hábitat por parte del ganado ovino y caprino que destruye las plántulas con sus pezuñas, por otro, a la expansión urbanística como en el caso de Querétaro, que ha eliminado grandes zonas de bosque tropical seco donde crecía esta especie, y por último, a la recolección directa de ejemplares con el motivo de confitar sus tallos y elaborar caramelos llamados "dulces de acitrón" o "dulces de biznaga", aunque hoy en día la recolección de plantas silvestres para este fin es ilegal y los dulces se deben elaborar a partir de ejemplares cultivados.