Holothyrus coccinella

Holothyrus coccinella Gervais, 1842

15-Septiembre-2021.
Cautividad. Europa, Austria, Viena, Innere Stadt, Museo de Historia Natural de Viena.
Coordenadas: 48°12′18″N, 16°21′34″E.
Leg: Isidro Martínez. Det: Naturhistorisches Museum Wien.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Arachnida.
Orden: Holothyrida.
Familia: Holothyridae.
Género: Holothyrus.
Especie: Holothyrus coccinella.

Ésta es la especie tipo de las dos que conforman el género Holothyrus. Es un ácaro parasitiforme relativamente grande, de entre cuatro y medio y cinco y medio milímetros de longitud corporal. Su tamaño permite distinguir fácilmente a esta especie de la otra de su género, H. legendrei, que es mucho más pequeña (apenas supera los tres milímetros). Es de color marrón rojizo. Su cuerpo está cubierto por un escudo dorsal altamente esclerotizado, brillante y con forma de domo, recubierto de vellos cortos. En los bordes de este escudo posee amplios y cortos peritremas al nivel del tercer par de patas. Además del escudo dorsal posee también un escudo ventral que incluye un par de valvas anales. Ente las coxas de las patas, los machos poseen un par de valvas genitales cubiertas de pelillos, y las hembras poseen cuatro escudos genitales, también vellosas. Los quelíceros están formados por tres segmentos, y los pedipalpos por cinco. Las coxas son libres, y en el macho, las patas del primer y el cuarto pares miden ocho milímetros de longitud y las del segundo y tercer pares unos seis milímetros. El primer par de patas del macho posee un largo cojinete, mientras que en la hembra, éste se halla muy reducido. Las uñas del primer par de patas de la hembra adulta son mucho más largas que las del macho adulto y que las de los inmaduros de ambos sexos.

Al igual que la otra especie de su género, es endémico de la isla de Mauricio, en el Océano Índico. Habita entre la hojarasca, sobre los musgos y bajo piedras en los bosques húmedos. Es un ácaro de movimientos lentos, que confía en su caparazón para escapar de los depredadores y se hace el muerto cuando es molestado. Si con esto no disuade a su atacante, este ácaro es capaz de exudar una sustancia de sabor desagradable que puede llegar a ser mortal para las aves de corral que ingieren a estos animales.