Arilus cristatus

Arilus cristatus (Linnaeus 1763)

1-Agosto-2019.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, Nueva Inglaterra, Nueva York, Manhattan, Museo Americano de Historia Natural, Sala Warburg del medio ambiente en el Estado de Nueva York.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Hemiptera.
Suborden: Prosorrhyncha.
Superfamilia: Reduvioidea.
Familia: Reduviidae.
Subfamilia: Harpactorinae.
Género: Arilus.
Especie: Arilus cristatus.

Ésta es posiblemente la más conocida de todas las especies de la familia Reduviidae, a causa de su gran tamaño, distintivo aspecto y área de distribución. Es la especie tipo de las cuatro que conforman el género Arilus, y la única de ellas presente en Estados Unidos. Es uno de los hemípteros terrestres más grandes de norteamérica, alcanzando entre veintiocho y treinta y seis milímetros de longitud corporal, con hembras que tienden a ser algo mayores que los machos. La característica más peculiar de este insecto es la alta cresta semicircular que recorre longitudinalmente el pronoto por su centro y que está orlada por una serie de entre ocho y doce dientecillos negros, dando a toda la estructura un aspecto similar al de una rueda de engranaje. El cuerpo es de color gris o pardo grisáceo. Su cabeza es alargada y estrecha, y termina en un grueso pico articulado doblado bajo ella. Este pico así como las antenas y las tibias y tarsos son de un color más rojizo que el gris apagado del cuerpo. Las membranas alares son de un tono broncíneo con tenues reflejos irisados. La hembra posee dos glándulas olorosas de color naranja brillante, que evagina desde el extremo de su abdomen como respuesta a una posible amenaza y posiblemente también como un medio de atracción sexual. Las ninfas tienen la cresta pronotal poco o nada desarrollada y cuando son muy jóvenes son negras con el abdomen de vivo color naranja. Las ninfas neonatas miden ocho milímetros de longitud corporal.

Se distribuye principalmente por el este de Norteamérica, extendiéndose por el sur hasta México y Guatemala. Habita en áreas con abundante vegetación, donde se oculta bajo las hojas, flores y tras los troncos cuando presiente algún peligro. Este animal no está indefenso, y si la emisión de malos olores y sonidos no basta para disuadir al atacante, cuando es capturado inflinge una picadura mucho más dolorosa y duradera que la de una avispa común, aunque poco peligrosa en realidad. Es activo principalmente de día, aunque puede mostrar actividad nocturna en las noches claras de luna llena. Su vuelo es pesado y ruidoso y no suele volar largas distancias. Se alimenta de todo tipo de insectos de tamaño adecuado, tales como orugas, abejas y escarabajos, en los que inserta su pico articulado para disolver sus jugos internos con su veneno. El canibalismo es muy común en esta especie, a veces unas ninfas capturan y devoren a otras si las encuentran, y en ocasiones la hembra devorea al macho tras la cópula, la cual tiene lugar en otoño. No es frecuente que esto suceda, y el macho suele quedar sujeto encima de la hembra los días posteriores a la cópula, para evitar que otros machos copulen con ella. La hembra fecundada pone entre cuarenta y doscientos pequeños huevos cilíndricos, dispuestos de forma muy ordenada y geométrica en una capa hexagonal sobre una superficie resistente, y tras poner los huevos muere. Los huevos eclosionan en la siguiente primavera. Las ninfas pasan por cinco mudas para alcanzar la fase adulta en el verano del mismo año.