Corydoras punctatus

Corydoras punctatus (Bloch, 1794)

5-Agosto-2017.
Cautividad. Europa, Alemania, Renania del Norte-Westfalia, región de Düsseldorf, Duisburgo, Konrad-Adenauer-Ring, en venta en una tienda de animales.
Leg: Isidro Martínez. Det: Zoo Zajac.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Osteichthyes.
Orden: Siluriformes.
Suborden: Siluroidei.
Superfamilia: Loricarioidea.
Familia: Callichthyidae.
Subfamilia: Corydoradinae.
Género: Corydoras.
Especie: Corydoras punctatus.

Es una especie de hasta seis centímetros y medio de longitud. Posee una cabeza grande y un cuerpo ahusado, aplanado en su parte ventral. Su piel carece de escamas y en su lugar posee placas óseas superpuestas. Su coloración de fondo es de un gris plateado, densamente cubierto por un punteado negro, y con la zona ventral blanca y sin punteado. Estas manchas negras de su cuerpo son más grandes en las poblaciones que viven sobre sustratos más oscuros, pero nunca froman líneas longitudinales. En el centro de la aleta dorsal posee una gran mancha negra circular. La aleta caudal posee finos puntos negros que se fusionan formando cuatro o más líneas transversales. Al contrario que la mayoría de las Corydoras, esta especie posee un dimorfismo sexual bien marcado: los machos poseen las aletas pectorales mucho más largas y gruesas debido a la presencia de numerosas pequeñas espinas en el primer radio endurecido.

Corydoras agassizii, C. ambiacus, C. leucomelas y C. schwartzi son similares, pero presentan una máscara negra sobre los ojos de la que carece C. punctatus, además los puntos negros de su cuerpo se alinean, formando líneas longitudinales. Lo mismo sucede en Corydoras julii y Corydoras trilineatus, las cuales carecen de máscara negra. Más difícil resulta distinguirla de Corydoras leopardus, que se distingue por su cabeza más alargada, su tamaño mayor y su coloración de fondo más dorada.

Es endémico de la cuenca del río Surinam en Surinam y la cuenca del río Iracoubo en la Guayana francesa. Vive aguas arriba, en pequeños arroyos someros y moderadamente soleados, con fondos arenosos o arenoso-limosos. También aparece en los márgenes de zonas estancadas, bosques inundados, presas y lagos. La hembra sostiene de dos a cuatro huevos cada vez entre sus aletas pélvicas, mientras el macho los fertiliza durante unos treinta segundos con la típica postura de cortejo de este género, en la que los dos sexos se colocan perpendicularmente formando una T. Una vez fecundados, la hembra nada hasta un lugar adecuado donde adhiere los muy pegajosos huevos a las hojas de plantas acuáticas o a rocas, troncos o raíces. La pareja repite este proceso hasta que la hembra queda vacía de huevos, colocando alrededor de un centenar en total. Los padres no cuidan de su puesta y devorarán los huevos que vuelvan a encontrar. Los huevos eclosionan entre tres y cinco días después.