Ahaetulla prasina

Ahaetulla prasina (Boie, 1827)

2-Julio-2016.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, California, San Diego, Parque Balboa, Zoo de San Diego, Discovery Outpost.
Leg: Isidro Martínez. Det: Zoo de San Diego.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Sauropsida.
Orden: Squamata.
Suborden: Ophidia.
Superfamilia: Colubroidea.
Familia: Colubridae.
Subfamilia: Colubrinae.
Género: Ahaetulla.
Especie: Ahaetulla prasina.

La serpiente látigo oriental es la de mayor tamaño de las ocho que componen el género Ahaetulla, pudiendo alcanzar hasta un metro y ochenta centímetros de longitud, de la cual hasta sesenta centímetros corresponden a la cola. La forma de su cuerpo es extraordinariamente fina, con una cabeza lanceolada de hocico puntiagudo proyectado hacia delante, más del doble de largo que el diametro de su ojo. El ojo posee una pupila horizontal. La coloración de la serpiente adulta varía de pardo claro hasta amarillo verdoso pasando por verde fosforito. En ocasiones una línea de color blanco a amarillo corre a lo largo de cada flanco por la parte inferior del animal. Incluso la lengua es de color verde neón. Las escamas de su cuerpo se disponen en quince hileras y normalmente poseen una quilla a partir de la región sacral. Hay de doscientas tres a doscientras treinta y cuatro escamas ventrales hasta la cloaca. La piel entre las escamas es blanca y negra en la región del cuello, haciéndose muy vistosa cuando la serpiente se dilata al tragar una presa o cuando pretende intimidar a un enemigo. Es una serpiente opistoglifa, venenosa pero de veneno poco potente y no es peligrosa para los humanos.

Esta serpiente se distribuye ampliamente por el sudeste asiático, desde la India y el sur de China hasta Vietnam, por el sur hasta las islas Filipinas y por el este hasta la isla indonesia de Ternate, dividiéndose en cuatro subespecies. Habita en las junglas tropicales húmedas, desde el nivel del mar hasta los mil trescientos metros de altitud, y es una especie diurna, arborícola, aunque a veces baja al suelo para buscar presas. Confía en su excelente camuflaje para pasar desapercibida ante los depredadores y de hecho, si se ve amenazada se queda inmóvil y mece suavemente su cabeza y cuello de lado a lado como una rama agitada por la leve brisa. Se alimenta casi exclusivamente de pequeños reptiles y de anfibios, aunque en cautividad acepta pequeños peces. Con sus extrañas pupilas horizontales, esta serpiente tiene una visión binocular que le permite distinguir entre presas inmóviles (que al ser de "sangre fría" no puede detectar por el calor) y objetos inanimados, de hecho, ésta y otras especies del género Ahaetulla son las que tienen la mejor vista de entre todas las serpientes.