Ardisia crenata

Ardisia crenata Sims, 1817

2-Febrero-2015.
Cautividad. Europa, España, Aragón, Zaragoza, en venta en una floristería.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.

Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Spermatophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Ericales.
Familia: Myrsinaceae.
Género: Ardisia.
Especie: Ardisia crenata.

Es un pequeño arbusto de hoja perenne, de crecimiento muy lento, que alcanza hasta tres metros de altura, con uno o varios troncos desde la base. Sus hojas miden hasta quince centímetros de longitud y cuatro de anchura, más hasta un centímetro de peciolo. Son simples, alternas, muy coriáceas, brillantes, lanceoladas, de color verde muy oscuro, con ápice acuminado y con borde crenado. En mayo y junio surgen racimos terminales sobre ramas especializadas axilares que miden de cuatro a cuarenta centímetros de longitud y poseen sólo dos o tres hojas. Flores fragantes, de cuatro a seis milímetros de diámetro, de color blanco o más raramente rosado, a menudo cubiertas de numerosos puntitos negros. Son muy típicas sus bayas monospermas de color escarlata, de seis a ocho milímetros de diámetro, que se forman en gran cantidad hacia el mes de octubre y duran casi todo en invierno. Puede florecer a partir de los dos años de edad.

Ardisia crenata está muy relacionada con Ardisia pseudocrispa, que se diferencia por sus hojas casi enteras en lugar de crenadas, y que carecen de la distintiva vena marginal que poseen las hojas de A. crenata.

Es nativa del este de Asia: suroeste de la India, China, Vietnam, Taiwán, Malasia y las islas Filipinas, pero debido a su amplio uso como ornamental, se ha escapado de cultivo en lugares como Florida donde a principios del siglo XX se transformó en una especie invasiva, así como en Australia y dos de las islas del archipiélago hawaiano. Debido a su abundancia de frutos puede formar extensas comunidades monoespecíficas de hasta cien plantas por metro cuadrado, eliminando las posibilidades de supervivencia de las plantas nativas. Habita en bosques, laderas de colinas, valles y matorrales, de cien a dos mil cuatrocientos metros de altitud. Prefiere suelos húmedos y tolera una sombra densa, por lo que suele crecer en los bosques y junglas.

En fruto:


En flor: