Berenicornis albocristatus

Berenicornis albocristatus (Cassin, 1848) Hartlaub,1857
Sinónimo: Tropicranus albocristatus (Cassin, 1848)

14-Agosto-2013.
Cautividad. Europa, República Checa, Praga, Zoo de Praga.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Aves.
Orden: Coraciiformes.
Suborden: Bucerotes.
Familia: Bucerotidae.
Subfamilia: Bucerotinae.
Género: Berenicornis.
Subgénero: Tropicranus.
Especie: Berenicornis albocristatus.

El cálao colilargo es un ave de hasta ochenta centímetros de longitud (aproximadamente la mitad de la cual corresponde a su cola). Posee un plumaje negro, salvo en la cabeza, donde es blanco, aunque cada pluma de la parte superior de la cabeza tiene la punta negra, y la subespecie cassini tiene los laterales de la cara negros. Las larguísimas plumas de la cola, escalonadas (más cortas cuanto más externas), tienen la punta blanca. En la subespecie cassini, las puntas de las coberteras alares son también blancas. El pico es negro (a menudo con un gran parche pálido, de extensión muy variable, en la mandíbula superior), relativamente esbelto y corto, de hasta ocho centímetros y medio de longitud, y con un casco poco desarrollado que se extiende por casi toda la longitud de la mandíbula superior. Los ojos están rodeados por un anillo ocular carnoso de color azul.

Habita en las junglas lluviosas del África centro-occidental, desde Guinea hasta Uganda y desde el Camerún hasta Angola. Se divide en tres subespecies. Puede encontrarse desde el nivel del mar hasta los mil quinientos metros de altitud en zonas boscosas, incluso en plantaciones con selvas cercanas. Vive en parejas o en pequeñas bandadas. Se alimenta en lo más denso del follaje de los árboles, y su dieta está constituida sobre todo por insectos, aunque también consume todo tipo de otros pequeños animalillos y ocasionalmente frutas. A menudo sigue a las tropas de monos y a las marabuntas de hormigas para capturar las presas espantadas por estos animales. El nido se sitúa en el agujero de un árbol, donde la hembra pone hasta seis huevos que incuba durante unos veinticinco días. Una vez puestos los huevos, la hembra queda encerrada dentro, ya que el macho tapona el orificio con barro y excrementos, dejando sólo una estrecha rendija por la cual poder alimentar a la hembra y a sus polluelos. Durante el periodo en que permanece encerrada, la hembra pierde sus plumas, que sirven para acolchar el nido. La hembra permanece con sus pollos hasta que éstos son capaces de salir del nido, llegado ese momento rompe las paredes de barro con su pico, y ambos sexos siguen recogiendo comida para sus polluelos.

En el zoo de Praga:


En el zoo de Bronx: