Batagur affinis

Batagur affinis (Cantor, 1847)

14-Agosto-2013.
Cautividad. Europa, República Checa, Praga, Zoo de Praga.
Leg: Isidro Martínez. Det: František Tymr.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Sauropsida.
Orden: Chelonia.
Suborden: Cryptodira.
Superfamilia: Testudinoidea.
Familia: Geoemydidae.
Subfamilia: Batagurinae.
Género: Batagur.
Especie: Batagur affinis.


Es una tortuga acuática, con una característica cabeza con el morro fuertemente dirigido hacia arriba y los orificios nasales en su extremo, y la comisura de la boca muy pronunciada. Las hembras pueden alcanzar hasta sesenta y dos centímetros de longitud de caparazón, y los machos hasta cuarenta y nueve centímetros. Los machos son completamente negros, con llamativos ojos amarillos, las hembras (en la foto) son de un color más apagado y tienen zonas amarillas en la parte baja de la cabeza y el borde del caparazón. Tanto las patas delanteras como las traseras son completamente palmeadas. Durante un tiempo se la consideró como una subespecie de la llamativa Batagur baska en la cual el macho tiene el caparazón gris, el cuerpo y patas rosas, y la cabeza negra. Sin embargo, se ha demostrado que son especies diferentes.

Se puede encontrar en el sur de Tailandia, Malasia y Sumatra y una población relicta en Camboya, habiéndose extinguido en Vietnam y en Singapur. Se divide en dos subespecies. Habita en aguas salobres y estuarinas, en las desembocaduras de ríos grandes. Es una especie omnívora, pero las frutas y brotes constituyen la mayor parte de su dieta. Anida en bancos arenosos a las orillas de playas fluviales o costeras, pudiendo producir, de noviembre a marzo (en la estación seca) hasta tres nidadas al año, cada una formada por unos veinticinco huevos. Algunas poblaciones anidan en masa y construyen falsos nidos para despistar a los depredadores. Las hembras pueden migrar grandes distancias desde sus territorios de alimentación hasta el emplazamiento de sus nidos. Las tortugas jóvenes de esta especie pueden alcanzar la madurez sexual a los nueve años en condiciones óptimas, pero en regiones con escasos recursos pueden demorar hasta veinticinco años.

Este galápago se halla en el mismo borde de la extinción. En Camboya se la daba por desaparecida, hasta que se redescubrió hace poco más de una década. Su mayor amenaza es la recolección de adultos y huevos para consumo humano o para su uso en medicina. Además de estas presiones, también sufren la pérdida y degradación de su hábitat mediante el minado de la arena, construcción de presas y contaminación del agua. Actualmente están estrictamente protegidas, los adultos están marcados y los nidos monitorizados. A pesar de los esfuerzos por su conservación, sus poblaciones siguen en declive.