Crataegus intricata

Crataegus intricata Lange, 1895

29-Agosto-2010.
Cautividad. Europa, España, Comunidad Valenciana, Valencia, Jardín Botánico de la Universidad de Valencia.
Leg: Isidro Martínez. Det: Botánico de Valencia.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Spermatophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Rosales.
Familia: Rosaceae.
Subfamilia: Amygdaloideae.
Género: Crataegus.
Especie: Crataegus intricata.

Este es un espino arbustivo, de hasta seis metros de altura. Las ramas poseen espinas rectas o curvadas, negruzcas, esbeltas, de dos y medio a cinco centímetros de longitud, y las ramas nuevas son rojizas. Sus hojas, caducas, son grandes, anchas, ampliamente elípticas o ampliamente ovaladas, cuneadas o redondeadas en su base, poco lobuladas, con tres o cinco lóbulos de senos someros, a menudo con los ápices reflejos, el margen de los lóbulos es muy finamente denticulado con dientes muy agudos, y al menos cuando jóvenes, cada diente termina en una glándula. Hay de cuatro a seis pares de nervios secundarios en cada hoja. El peciolo mide hasta la mitad de la longitud del limbo, y el limbo mide de dos y medio a nueve centímetros de longitud y de uno y medio a cinco de anchura. Florece de finales de abril a inicios de junio, con inflorescencias formadas por entre tres y ocho flores blancas, cada una de entre dieciséis y veinte milímetros de diámetro, provista de cinco pétalos redondeados, diez estambres con las anteras de color cremoso, y entre tres y cinco estilos. Se dice que sus flores huelen a pescado podrido, pero al parecer esto sólo sucede en flores ya pasadas, no en las recién abiertas. Sus frutos son pomos orbiculares o piriformes, comestibles, de entre ocho y trece milímetros de diámetro, que cuando están maduros, en septiembre y octubre, van del rojo al marrón, más raramente verde o amarillo apagado. Los sépalos quedan persistiendo en el ápice del fruto, patentes o reflejos. El fruto contiene de tres a cinco semillas o pirenos.

Es nativo del este de Norteamérica, desde Ontario hasta Georgia y Alabama. Habita en bosques abiertos y sus claros y linderos y en dehesas arboladas, a entre diez y trescientos metros de altitud. Tiene cierta preferencia por hábitats relativamente prístinos, tolerando mal las perturbaciones humanas. Prospera en todo tipo de suelos mientras estén bien drenados, y tolera la sequía, el viento y la contaminación, pero no la cercanía al mar. Tarda de cinco a ocho años desde que germina hasta que da sus primeros frutos.