Chiasognathus grantii

Chiasognathus grantii Stephens, 1831.

1-Julio-2012.
Cautividad. Europa, España, Madrid, Museo Nacional de Ciencias Naturales.
Leg: Isidro Martínez. Det: Museo Nacional de Ciencias Naturales.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Coleoptera.
Suborden: Polyphaga.
Superfamilia: Scarabaeoidea.
Familia: Lucanidae.
Subfamilia: Lucaninae.
Género: Chiasognathus.
Especie: Chiasognathus grantii.

Este espectacular ciervo volante, mide hasta nueve centímetros de longitud total en el caso de los machos, incluyendo las mandíbulas, mientras que la longitud corporal es de entre tres y medio y cinco centímetros. Las hembras, al no tener las mandíbulas desarrolladas, tienen mucha menor longitud, además su cuerpo es ligeramente menor que el de los machos, con entre dos y medio y cuatro centímetros de longitud. Es de color pardo con algunos reflejos irisados verdes, y el macho posee patas y antenas muy largas y finas y unas tremendas mandíbulas regularmente denticuladas en su cara interna, más largas que el resto del cuerpo, mientras la hembra posee un aspecto más convencional. Las mandíbulas del macho son las más largas en proporción a la longitud del cuerpo de entre todos los insectos. Los ojos son pequeños, y las antenas poseen un muy curioso anillo de pelos amarillentos cerca del ápice del escapo. El pronoto del macho posee sendas afiladas espinas recurvadas hacia delante en los ángulos posteriores. Las patas anteriores del macho son más largas y gruesas que las medias y posteriores, y la cara interna de sus tibias está armada de fuertes espinas dispuestas en una hilera regular, el ápice de las tibias se curva fuertemente hacia dentro. Las hembras en cambio poseen todas las patas del mismo tamaño. Los tarsos de todas las patas terminan en uñas muy grandes y fuertemente curvadas. Lalarva madura mide ocho centímetros de longitud y es blanca, con forma de C, con la cápsula cefálica de nueve milímetros, de color castaño, y las patas bien desarrolladas, de color testáceo.

Se distribuye por el Cono Sur de Sudamérica. Se encuentra en los bosques, donde la larva se desarrolla en el suelo alimentándose de raíces de plantas herbáceas, y los imagos acuden a las heridas rezumantes de savia en los troncos de los árboles. Es una especie catalogada como Vulnerable, afectada por el calentamiento global que lo desplaza al sur, además las capturas para coleccionistas también suponen un riesgo por la alta demanda global de esta especie. Es muy popular entre los coleccionistas de insectos. Es de actividad crespuscular, y acude a la luz artificial. Durante la época de apareamiento, las hembras se sitúan en lo más alto de las copas de grandes árboles, y los machos deben subir hasta ella, derribando a otros machos con sus mandíbulas con las que tratan de tirar a su rival del árbol. El primero que consigue llegar hasta la hembra gana el derecho a aparearse, aunque la hembra opone resistencia y el macho recurre de nuevo a sus mandíbulas para sujetarla y proceder a la cópula.

Charles Darwin mencionó a esta especie en sus obras, haciendo notar que sus mandíbulas no tienen utilidad defensiva ante un depredador pues no tienen fuerza para causar daño, de modo que el único objeto de las mandíbulas es sexual. Por ello se suele llamar popularmente a este insecto como "escarabajo de Darwin".