Capricornis crispus

Capricornis crispus (Temminck, 1836) Gray, 1846

27-Julio-2019.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, Nueva Inglaterra, Massachusetts, Suffolk, área metropolitana de Boston, Cambridge, Campus de la Universidad de Harvard, Museo de Historia Natural de Harvard.
Leg: Isidro Martínez. Det: Harvard Museum of Natural History.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Synapsida.
Orden: Artiodactyla.
Suborden: Ruminantia.
Superfamilia: Bovoidea.
Familia: Bovidae.
Subfamilia: Caprinae.
Género: Capricornis.
Especie: Capricornis crispus.

El serau japonés es un curioso ungulado de pequeño porte, con una alzada de entre setenta y setenta y cinco centímetros hasta la cruz. Posee un cuerpo grueso y compacto. Su largo pelaje es de coloración variable, pudiendo ser negro, pardo oscuro o blanquecino, con las zonas inferiores tendiendo a blanquecinas, sobre todo en el cuello, y el pelaje de verano es más claro que el de invierno. En invierno, el pelaje es muy largo y denso, especialmente en la cola y en la barba, con pelos que pueden alcanzar los diez centímetros de longitud. A diferencia de otras especies de su género, carece de crin. Ambos sexos poseen cuernos cortos y finos, de doce a dieciséis centímetros de longitud, dirigidos hacia atrás, negros y casi rectos. Sus orejas son más cortas que las de las especies continentales del mismo género. Las mandíbulas cuentan con treinta y dos dientes, cuya cara interna queda cubierta por un emplaste negro, y la lengua tiene la punta en forma de V. Delante de los ojos, ambos sexos poseen grandes glándulas. Entre las pezuñas también posee glándulas, aunque poco desarrolladas. La cola peluda mide unos seis centímetros de longitud. Las hembras poseen dos pares de mamas.

Es endémico de Japón, donde vive sobre todo en el norte y centro de la isla principal, Honshū, aunque existen poblaciones residuales en Kyushu y Shikoku. Habita en regiones boscosas de montaña, densamente arboladas, y es la especie de su género más resistente al frío. Se alimenta de hojas, brotes y bellotas, y normalmente evita la hierba en su dieta. Es de actividad diurna, aprovechando principalmente las horas frescas del día. Suele verse de forma solitaria, en parejas o en pequeños grupos familiares. Durante el cortejo, el macho lame la boca de la hembra, golpetea con sus patas anteriores las patas posteriores de ella, y frota sus cuernos contra su vagina. Se reproduce una vez al año, entre septiembre y enero, y la cría nace en junio o agosto. Al nacer, mide treinta centímetros de altura hasta la cruz, y permanece junto a su madre durante sus primeros uno o dos años de vida, separándose gradualmente de ella después. Si la cría no muestra intención de alejarse de su madre, ésta se empieza a mostrar hostil para expulsarla. Madura sexualmente hacia los dos años y medio, y puede vivir hasta veinticinco años. Este animal fue cazado hasta casi su extinción hasta que fue declarado como monumento nacional de Japón en 1955, prohibiendo su caza y permitiendo a la especie recuperar sus poblaciones que hoy en día son sanas y numerosas. De hecho, tanto es así que fuera de los espacios protegidos se le suele considerar una plaga, situación a la que ha llegado seguramente gracias al exterminio del que fue casi su único depredador natural, el lobo japonés (Canis lupus hodophylax). El nemátodo Protostrongylus shiozawai parasita los pulmones de este ungulado y no puede vivir en ninguna otra especie de animal.