Apis florea

Apis florea Fabricius, 1787

27-Julio-2019.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, Nueva Inglaterra, Massachusetts, Suffolk, área metropolitana de Boston, Cambridge, Campus de la Universidad de Harvard, Museo de Historia Natural de Harvard.
Ejemplar capturado en Amballa (India) por M. M. Carleton.
Leg: Isidro Martínez. Det: Harvard Museum of Natural History.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Hymenoptera.
Suborden: Apocrita.
Superfamilia: Apoidea.
Familia: Apidae.
Subfamilia: Apinae.
Género: Apis.
Subgénero: Micrapis.
Especie: Apis florea.

Ésta es una de las especies más primitivas del género Apis y la de menor tamaño, con tan sólo entre siete y diez milímetros de longitud corporal para la casta obrera. Es de color pardo oscuro con la base del abdomen anaranjada que se oscurece gradualmente hacia atrás, un diseño común a otras especies del género. Los zánganos poseen en las tibias posteriores un proceso similar a un pulgar, que utilizan para sujetar las patas de la futura reina durante la cópula. El lóbulo fimbriado de esta especie posee tres salientes, y su aguijón consiste en dos barbas de estilete. La glosa mide poco más de tres milímetros de longitud, el ala anterior mide unos seis milímetros y medio de longitud y la posterior un promedio de tres milímetros de longitud.

Se distribuye ampliamente por todo el sur de Asia, desde Omán hasta Indonesia, quedando limitada al norte por la barrera del Himalaya. En 1985 fue introducida en Sudán. Habita en selvas tropicales y áreas de cultivo, desde el nivel del mar hasta los mil quinientos metros de altitud. Sus colmenas consisten en un solo panal, que pende de una rama a entre uno y ocho metros del suelo, bien oculto entre el follaje denso. A veces anida en las paredes de cuevas y en estructuras artificiales. Si contruyen un nuevo panal cerca de uno viejo (a no más de doscientos metros de distancia), aprovechan la cera del viejo, algo que no hace ninguna otra especie del género. Sus colmenas, de nueve a quince centímetros de longitud y de once a veintidós centímetros de anchura, están siempre recubiertas de una densa capa de abejas, pero sus colonias son poco numerosas. Como en otras especies de "colmena expuesta", esta especie produce "olas" de abejas ante la aproximación de un enemigo, para confundirlo: las abejas agitan sincrónicamente su abdomen hacia los lados creando "olas" análogas a las que los humanos hacen en los eventos deportivos. Mientras lo hace, emite un sonido sibilante, exclusivo de esta especie. Si la amenaza persiste, algunas obreras salen para atacar al intruso. Una técnica defensiva exclusiva de esta especie consiste en crear anillos de propóleo, de dos y medio a cuatro centímetros de anchura, en la rama donde se sostiene el panal, estas bandas de propóleo pegajoso detienen a las hormigas. El sistema social de estas abejas es igual al de la abeja melífera occidental, y como ella, emplea una danza de comunicación para informar sobre la localización de fuentes de polen y néctar. Sin embargo, esta danza es mucho menos compleja que en las otras especies, consistiendo simplemente en una carrera recta en la dirección de la fuente de alimento, y además la realiza en la superficie horizontal del panal, es decir, en la parte más alta, que queda cubriendo la rama, en lugar de realizarla en la superficie vertical del panal como hacen las otras especies de Apis. Cada futura reina copula con sólo tres o cuatro zánganos en el vuelo nupcial, una cantidad mucho menor que la de otras especies de abejas melíferas. La cantidad de miel producida por esta abeja es mucho menor que la de la abeja melífera occidental, pero suficiente como para que familias enteras de humanos lleguen a vivir de este recurso en la época de mayor producción. El ácaro Euvarroa sinhai depende exclusivamente de esta especie de abeja ya que no puede parasitar a otras del mismo género.

Hasta ahora solo teníamos una especie de este conocido género. La verdad es que no conocía ninguna especie más de Apis.