Hyles euphorbiae

Hyles euphorbiae (Linnaeus, 1758) Hübner, 1819
Sinónimo: Celerio euphorbiae (Linnaeus, 1758) Oken, 1815

23-Septiembre-2007.
Europa, España, Aragón, Zaragoza, La Cartuja Baja, Galacho de La Cartuja.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Lepidoptera.
Suborden: Glossata.
Superfamilia: Bombycoidea.
Familia: Sphingidae.
Subfamilia: Macroglossinae.
Género: Hyles.
Especie: Hyles euphorbiae.

La esfinge de las lechetreznas es una notable polilla de entre seis y medio y ocho y medio centímetros de envergadura alar, y presenta un aspecto bastante vistoso, aunque también variable. Presenta la forma típica e las esfinges, con cuerpo marcadamente fusiforme y alas anteriores largas y estrechas, con ángulo anal muy obtuso. Por el anverso, sus alas anteriores están adornadas por tres grandes manchas de color pardo oliváceo oscuro cercanas al margen anterior, además de una banda del mismo color que corre paralela al margen externo y se atenúa gradualmente desde la base hasta la punta. La zona costal es de un tono marrón más pálido y sin tonalidades oliváceas. El resto del ala (a cada lado de la banda submarginal pardo-olivácea) es de color leonado, a menudo con tintes rosados de mayor o menor intensidad. El ala posterior es muy diferente: en su mayor parte rosa vivo, pero con una contrastada base negra y una banda submarginal del mismo color, siendo el margen blanco. El reverso de ambos pares de alas consiste en sombras rosas y leonadas, sin marcas ni dibujos bien visibles. El rechoncho cuerpo fusiforme tiene la parte dorsal de la cabeza y del tórax del mismo color pardo oliváceo que las manchas del ala anterior, pero bordeado por sendas líneas blancas contrastaddas sobre los ojos y continuando a los lados del tórax, el abdomen es en cambio de un tono pardo más pálido, con conspicuas marcas blancas y negras en los laterales de la base, quedando tales marcas normalmente ocultas bajo las alas. La cara ventral del cuerpo tiene sombras rosas similares a las del reverso de las alas. La oruga maura mide siete u ocho centímetros de longitud y es una de las orugas más vistosas y de coloración más abigarrada de cuantas existen en Europa, con un diseño que diríase ideado por el mismo Gaudí. La cabeza es roja y una línea de escarlata a amarilla recorre longitudinalmente el centro del dorso, el cuerno posterior, claramente curvado hacia abajo y de longitud mediana, es también rojo, pero con la punta negra. Los laterales son negros con una gran mancha redonda de blanca a roja a cada lado de cada segmento y otra blanca más alargada justo bajo ella, estas dos manchas quedan incluidas en una banda vertical negra intensa que termina en la banda roja dorsal, pero en cambio las zonas negras intermedias están salpicadas de una constelación de minúsculos puntitos blancos muy densos y muy bien ordenados en hileras verticales. Una banda longitudinal entre naranja y verde se intuye interrumpiendo todas estas zonas negras estrelladas de blanco por su mitad, sin que los puntitos blancos se interrumpan por ello. Finalmente, la zona ventral es verde pálido, con las patas granates, cada una interrumpida por una faja negra de puntitos blancos de modo que el color granate se sitúa por debajo y por encima de dicha faja. La coloración de la oruga es de todos modos variable, habiendo ejemplares más verdes, más rojos o más negros, y también cambia con la edad. La crisálida es de color pardo claro con reticulado negro. Los huevos son esféricos, brillantes y de color azul verdoso, de un milímetro de diámetro.

Se distribuye ampliamente por el norte de África, la región mediterránea europea (con fluctuaciones migratorias que cada año superan la latitud de los Alpes expandiéndose por gran parte de Europa) y gran parte de Asia occidental, al este hasta China, dividiéndose en tres subespecies. También se introdujo intencionadamente en Norteamérica para controlar a una planta exótica invasiva allí: Euphorbia esula. Puede verse en todo tipo de ambientes, salvo bosques densos, desde el nivel del mar hasta los dos mil trescientos metros de altitud, siendo una especie frecuente y muy adaptable que aparece incluso en entornos urbanos, aunque en general prefiere terrenos baldíos, graveras, dunas, campos, caminos y pendientes soleadas. Los imagos vuelan en dos generaciones anuales, una a finales de primavera y la otra durante too el verano. Son de actividad crepuscular y nocturna, y se dedican a libar el néctar de flores tubulares, como las de la madreselva, con vuelos de corta duración. La cópula dura tres horas, y en cuanto termina, la hembra se dedica a poner huevos durante esa noche y la siguiente en las partes más tiernas de su planta nutricia, generalmente en pequeños grupos de alrededor de cinco huevos (lo que es raro entre las esfinges europeas, que suelen poner sus huevos aislados). Los huevos tardan unas dos semanas en eclosionar. Su oruga se alimenta exclusivamente de Euphorbia, prefiriendo las especies herbáceas de porte mediano y hojas relativamente grandes, tales como Euphorbia characias, Euphorbia serrata, Euphorbia paralias y Euphorbia cyparissias. Estas plantas son muy conocidas por el látex tóxico blanco que mana abundantemente por los cortes y heridas de tallos y hojas, y las orugas son por tanto tóxicas cuando han ingerido alimento (aunque no acumulen las toxinas en su cuerpo), de ahí su vistosísima coloración de advertencia. En raras ocasiones se han registrado casos de orugas alimentándose de otros tipos de plantas: acedera, vid, mercurial, adelfilla... Inverna como crisálida, situada en el suelo entre la hojarasca.

Imago:


Larvas:




Exuvia:


Crisálida recién formada, sin su color definitivo:


Hyles euphorbiae junto a otra esfinge, Deilephila porcellus, en una trampa de luz:


Vídeo de orugas comiendo:

Que reportaje tan extenso tiene esta especie. Estas vistosas orugas las he visto varias veces, tanto en España como en Marruecos, incluso una vez las crié hasta que saliera el adulto, sin embargo es una especie que me falta.