Hemigrammus erythrozonus

Hemigrammus erythrozonus Durbin, 1909

23-Mayo-2009.
Cautividad. Europa, España, Madrid, Faunia.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Osteichthyes.
Orden: Characiformes.
Suborden: Characoidei.
Superfamilia: Characoidea.
Familia: Characidae.
Subfamilia: Tetragonopterinae.
Género: Hemigrammus.
Especie: Hemigrammus erythrozonus.

El popularmente llamado "tetra luminoso" es un pequeño pececillo de hasta treinta y tres milímetros de longitud, con un cuerpo fusiforme de sección redondeada. Su cuerpo es marcadamente translúcido, con tonos ahumados y a menudo con brillos amarillos difusos, pero con una característica banda horizontal de color rojo brillante en cada flanco, que recorre todo el cuerpo, desde la mandíbula superior, pasando por la parte superior del ojo, hasta la base de la aleta caudal. La aleta dorsal, alta y estrecha, también posee la mitad anterior de vivo color rojo, mientras que el resto de la aleta es translúcido y a menudo la punta está finamente marcada de blanco. El borde frontal de la aleta anal falciforme está a menudo marcado de blanco y/o amarillo, y también las puntas de las aletas pélvicas son a menudo blancas. Tras la aleta dorsal cuenta con una aleta adiposa. Las aletas pectorales y caudal son transparentes, sin las puntas blancas.

Habita en el norte de la cuenca amazónica, concretamente en la cuenca del río Esequibo en las Guayanas. Vive en aguas ácidas, turbias y oscuras, de fondo arenoso y ricas en taninos, y de luz filtrada por el denso follaje de los árboles que crecen sobre ellas. Por ello, este pez se vale de las marcas fuertemente reflectantes de sus flancos y de los ojos, para permanecer en contacto con sus congéneres. Es un pez pacífico y tranquilo que vive en cardúmenes de al menos seis ejemplares. Se alimenta de gusanos, pequeños crustáceos y plantas. La hembra produce unos dos centenares de huevos que dispersa entre la vegetación sumergida mientras el macho libera el esperma para fecundarlos, pero ninguno de los dos padres otorga cuidados a su puesta, y de hecho devorarán todos los huevos que encuentren. Aquellos huevos que pasen desapercibidos eclosionarán un día después, y las larvas tardan tres o cuatro días más en absorber el saco vitelino y transformarse en alevines capaces de nadar. Puede vivir hasta tres años.