Diospyros lycioides

Diospyros lycioides Desfontaines, 1805

15-Julio-2016.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, California, San Diego, Encinitas, Quail Botanical Gardens.
Leg: Isidro Martínez. Det: Botánico de San Diego.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Spermatophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Ericales.
Familia: Ebenaceae.
Género: Diospyros.
Especie: Diospyros lycioides.

Es un arbusto o arbolito caducifolio, dioico, de hasta siete metros de altura, con una copa abierta y ramas arqueadas, a veces espinosas. La corteza es de color gris oscuro lisa. Las ramillas jóvenes están cubiertas de una larga y densa vellosidad. Posee un follaje verde azulado, con hojas dispuestas en espiral en el extremo de las ramillas, simples, con un peciolo de hasta un centímetro y medio de longitud y un limbo obovado u oblanceolado de hasta ocho centímetros de longitud y tres de anchura, con cinco o seis pares de nervios secundarios, el margen entero y fuertemente curvado hacia dentro por el envés, la base cuneada y el ápice de truncado a agudo. Posee pequeñas flores acampanadas, solitarias, axilares, péndulas, de hasta un centímetro y medio de diámetro, de color amarillo cremoso, que emiten una fragancia dulce, especialmente durante la noche. Cada flor cuelga de un pedúnculo fino de hasta tres centímetros de longitud, el cáliz de hasta ocho milímetros de longitud se divide en cinco amplios sépalos cubiertos de vellosidad sedosa, y la corola acampanada, de hasta un centímetro de longitud, está formado por cinco pétalos soldados hasta su mitad. Las flores masculinas poseen diez estambres de hasta cuatro milímetros y medio de diámetro y un pistilo no funcional, carente de estigma, y las flores femeninas poseen diez estambres no funcionales, vellosos, de hasta dos milímetros de longitud y un pistilo con entre tres y cinco estilos, cada uno terminado en un estigma bilobulado. Florece de septiembre a diciembre y fructifica de enero a mayo. Sus frutos son atractivas bayas comestibles, de cáliz persistente fuertemente reflejo, ovoides o globosas, de hasta dos centímetros de longitud, de color rojo, pardo rojizo o negro al madurar, y de sabor dulce. El fruto es velloso cuando es joven, pero al madurar se vuelve glabro. Contiene entre una y seis semillas pardas y lisas de hasta trece milímetros de longitud.

Se distribuye ampliamente por África Central, el sur de Tanzania y llegando por el sur hasta El Cabo, aunque está ausente de las regiones donde llueve en invierno. También se ha naturalizado en Australia, donde constituye una especie invasiva. Se divide en cuatro subespecies que varían en la apariencia de sus hojas. Habita en regiones rocosas con suelos bien drenados, aunque también puede crecer a lo largo de las riberas de cursos de agua. A menudo forma colonias densas. Además de sus frutos comestibles, de este árbol se puede obtener una especie de cerveza, un substituto del café de sus semillas tostadas, madera de buena calidad para pequeños objetos, un tinte amarillento de las raíces, la corteza se puede usar para curtir cuero y tiene usos medicinales y folclóricos.

Su nombre hace perfecta referencia al aspecto de esta especie, nunca hubiera pensado en un Diospyros al ver la imagen.

Fue ese el motivo que me indujo a fotografiarlo a pesar de no tener flores ni frutos, cosa que no haría con plantas de aspecto más ordinario.