Conus tribblei

Conus tribblei Walls, 1977

19-Enero-2016.
Cautividad. Asia, Islas Filipinas, Bisayas Centrales, Bohol, Isla de Panglao, Población Proper, Calle J. Teófilo, Nova Shell Museum. Ejemplares recolectados por Quirino Hora en Samar (Filipinas).
Leg: María Pitarch. Det: Quirino Hora.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Mollusca.
Clase: Gastropoda.
Orden: Neogastropoda.
Superfamilia: Conoidea.
Familia: Conidae.
Subfamilia: Coninae.
Género: Conus.
Subgénero: Splinoconus.
Especie: Conus tribblei.

Este es un cono típico, cuya etimología es bastante curiosa: el epíteto específico tribblei hace honor a "Tribble", el gato de Jerry Walls, quien descrubrió este caracol marino. Su concha mide de cuatro a catorce centímetros de longitud en los ejemplares adultos y posee una primera vuelta de perfil casi recto pero suavemente sinuoso, tendiendo a cóncava en la mitad anterior y a convexa en la posterior. La espira es moderadamente elevada y con el centro elevado y puntiagudo. Fuertes costillas longitudinales en relieve aparecen cerca del extremo anterior de la concha, desapareciendo gradualmente hacia la mitad de la primera vuelta. La concha es blanca con grandes e irregulares manchas pardo rojizas que forman dos bandas en la primera vuelta, la banda anterior más estrecha y la posterior mucho más ancha. La boca o peristoma es larga y estrecha, aunque más ancha en la parte anterior que en la posterior, y su interior es blanco.

Se distribuye por la franja indopacífica, desde Japón hasta Australia. Se divide en dos subespecies, que algunos autores consideran como especies separadas: la nominal y Conus tribblei queenslandis, esta última ocupando desde Queensland hasta Nueva Caledonia. Es un animal de aguas profundas que se puede encontrar a entre cien y trescientos metros bajo la superficie del mar. Probablemente vive en lechos arenosos y/o limosos. Su biología es desconocida a causa de la profundidad en la que vive, pero el análisis químico de su veneno sugiere que es un depredador no especializado, que captura cualquier tipo de presas a su alcance.

¿Has terminado ya con Conus?, nunca voy a tener tantas especies como tu.

Aun me quedan dos. La verdad es que uno termina un poquito cansado de tanto Conus, sobre todo siendo fotos borrosas malas y con la desventaja de no ser hechas por mí.