Batozonellus lacerticida

Batozonellus lacerticida (Pallas, 1771)

27-Julio-2021.
Europa, España, Andalucía, Almería, El Ejido, Punta Entinas-Sabinar, en flores de Limonium.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Hymenoptera.
Suborden: Apocrita.
Superfamilia: Vespoidea.
Familia: Pompilidae.
Subfamilia: Pompilinae.
Género: Batozonellus.
Especie: Batozonellus lacerticida.

Es una avispa grande y vistosa que alcanza entre quince y veinticinco milímetros de longitud corporal, y es la especie tipo de las aproximadamente una veintena que conforman el género Batozonellus. Es en su mayor parte de color negro, con marcas amarillas en la cabeza (por delante y por detrás de los ojos), en el tórax (una gran media luna ocupando el pronoto, y dos pequeñas marcas redondeadas alineadas en la parte posterior del dorso), y en el abdomen (diez franjas transversales partidas en su centro, una por cada segmento abdominal). Sus antenas son gruesas y atenuadas, de color naranja intenso, ennegreciéndose hacia la punta, es frecuente que el animal mantenga las antenas enrolladas en espiral cuando está en reposo. Las patas poseen las coxas negras, los fémures casi totalmente negros salvo las puntas anaranjadas, y las tibias y tarsos anaranjados. Las alas son muy vistosas, de color naranja ambarino intenso con un amplio borde negro en el ápice.

Cryptocheilus octomaculatus es muy parecido pero carece de marcas amarillas en el tórax y posee sólo cuatro bandas amarillas en el abdomen en lugar de cinco.

Puede encontrarse por todo el Paleártico, desde la Península Ibérica hasta Japón y tanto en zonas cálidas como frías, llegando desde Polonia y el norte de China hasta el norte de África, por lo que es una especie muy adaptable. A pesar de ello está en grave regresión en Europa Central, a causa del avance de los bosques y de la extracción de arenas. Habita en regiones soleadas, con preferencia por aquellas que disponen de suelos arenosos, en zonas de llanura con vegetación poco densa. Los imagos aparecen de junio a septiembre (los machos aparecen unos días antes que las hembras), y visitan diversas flores, alimentándose de su néctar. Entre sus flores favoritas están las de los cardos, el aladierno, el tomillo y el cardo corredor. Se ignora el motivo que llevó a Pallas a llamar a la especie "lacerticida", es decir asesina de lagartos, ya que esta avispa no depreda sobre ningún reptil. En cambio, durante los meses estivales, las hembras fecundadas buscan arañas a las que paralizar como alimento de sus futuras larvas. Esta avispa está muy especializada y sólo captura grandes arañas de tela orbicular (familia Araneidae), de los géneros Argiope y Araneus. En esto se diferencia de la mayor parte de los pompílidos, que cazan arañas terrestres, la estrategia de caza de esta especie ha evolucionado para poder capturar a estas grandes arañas que se sitúan en el centro de sus telas a cierta altura del suelo, sin enredarse en sus resistentes telas. La avispa paraliza a la araña con su aguijón y la arrastra luego hasta su nido subterráneo, entonces pone un huevo en el abdomen de la araña. La larva resultante utilizará a la araña paralizada como despensa viviente hasta acabar consumiéndola, entonces se transformará en crisálida en la primavera del siguiente año, para emerger como adulto a comienzos de verano.