Berteroa incana

Berteroa incana (Linnaeus, 1753) De Candolle, 1821

18-Julio-2014.
América, Norteamérica, Estados Unidos, Montana, Carbon, Área Metropolitana de Billings, Red Lodge.
Leg: Juan Pablo Martínez. Det: Alexis Loher.

Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Spermatophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Capparidales.
Familia: Brassicaceae.
Género: Berteroa.
Especie: Berteroa incana.

Esta planta herbácea es generalmente bienal, aunque a veces puede ser anual o perenne de vida corta. Sus tallos y hojas son densamente peludos, con pelos tanto simples como estrellados, aplanados. Sus tallos, de hasta ochenta centímetros de altura (en raras ocasiones más de un metro), suelen ser más o menos erectos, uno o unos pocos por planta. Las hojas son hirsutas y grisáceas, las basales miden hasta diez centímetros de longitud, y las caulinares, más pequeñas, son alternas, carecen de peciolo y tienen el margen entero. La inflorescencia, situada en lo alto de un largo y esbelto tallo, es un denso racimo de flores, cada una de ellas con cuato pétalos blancos de medio centímetro de longitud, profundamente hendidos en su mitad de manera que cada pétalo parece doble. El fruto es una silícula hirsuta, ovalada y plana, de hasta un centímetro de longitud, que crece aplicada al tallo.

Es nativa de Europa centro-oriental y Asia occidental, pero ha sido introducida tanto en Europa occidental como en Norteamérica, considerándose una especie invasiva. Sus semillas seguramente llegaron mezcladas con semillas de cultivos forrajeros. Crece en márgenes de caminos, cunetas, granjas, pastizales, riberas y lugares degradados. Tolera muy bien el frío invernal y la sequía estival, así como los suelos muy pobres, arenosos o gravosos, por lo general calcáreos. En ocasiones se valora como ornamental y se vende en las mezclas de semillas para naturalizar. Se suele plantar para cubrir rápidamente las escombreras de los lugares donde se practica la minería. En los cultivos de alfalfa y trébol para forraje se contempla como una mala hierba que reduce el valor nutritivo de la cosecha: de hecho, la planta es tóxica para los caballos, pudiendo incluso llegar a ser mortal para ellos.