Consolida orientalis

Consolida orientalis (J. Gay ex Des Moulins, 1839) Schrödinger, 1909 var. hispanica Losa et Rivas Goday, 1974

31-Mayo-2014.
Europa, España, Aragón, Zaragoza, Campo de Daroca, Abanto, Ojos del Jalón, El Ojo de Pardos, en el borde de un campo de cebada.
Leg: Isidro Martínez. Det: Óscar Torrijo.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Spermatophyta.
Clase:  Magnoliopsida.
Orden: Ranunculales.
Familia: Ranunculaceae.
Subfamilia: Ranunculoideae.
Género: Consolida.
Especie: Consolida orientalis.

Hierba anual, que puede medir hasta ochenta centímetros de altura. Tallos simples o poco ramificados, erectos. Hojas palmatífidas, divididas en numerosos segmentos lineares ramificados que miden hasta dos milímetros de anchura. Las flores se agrupan en un largo y vistoso racimo erecto terminal, son zigomorfas y de un intenso color púrpura. Se abren de mayo a agosto. Carece en realidad de pétalos, como es habitual en las ranunculáceas, y los sépalos grandes y vivamente coloreados asumen la función de pétalos. El sépalo superior posee un espolón trasero, recto o recurvado hacia arriba, que mide hasta un centímetro de longitud. El fruto es un folículo simple (no triple como en los Delphinium), que mide hasta dos centímetros y medio de longitud. Sus semillas son extremadamente venenosas, y han sido usadas en decocción para combatir los piojos.

Es natural de la cuenca Mediterránea, donde crece mezclado en campos de cultivo, especialmente los de cereales, o en barbechos, cunetas, bordes de caminos y pastizales pedregosos, en zonas de altitud moderada. Necesita ambientes soleados y suelos no excesivamente húmedos. En ocasiones se cultiva como ornamental y en algunas regiones donde no es autóctona se ha naturalizado, como en Portugal.