Bycanistes fistulator

Bycanistes fistulator (Cassin, 1852)
Sinónimo: Ceratogymna fistulator (Cassin, 1852)

11-Agosto-2013.
Cautividad. Europa, República Checa, Bohemia, Pilsen, Zoo y Jardín Botánico de Plzeň.
Leg: Isidro Martínez. Det: František Tymr.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Aves.
Orden: Coraciiformes.
Suborden: Bucerotes.
Familia: Bucerotidae.
Subfamilia: Bucerotinae.
Género: Bycanistes.
Especie: Bycanistes fistulator.

El cálao silbador es un ave de percha de cuarenta y cinco a cincuenta centímetros de longitud, siendo la especie más pequeña del género Bycanistes. Tiene un plumaje negro brillante, con el vientre blanco, son también blancas las puntas de las rectrices (salvo las dos centrales), y las rémiges secundarias, según las subespecies, son de parcial a totalmente blancas. Tiene un pico muy grueso, bastante corto para un cálao, de superficie rugosa, de color pajizo más o menos moteado difusamente de negro, y no posee realmente un verdadero casco como el de la mayoría de los cálaos, sino apenas un pequeño resalte, menos voluminoso en las hembras que en los machos. El pico de las hembras también es ligeramente más corto que el de los machos. La piel desnuda alrededor de los ojos es de color azul grisáceo. Los juveniles se asemejan en su plumaje a los adultos, pero con un pico más corto que el de éstos y sin ningún resalte, y con algunas plumas marrones cerca de la base del pico.

Se distribuye por África tropical occidental, desde Senegal hasta Uganda, y al sur hasta alcanzar Angola, dividiéndose en tres subespecies. Habita en las junglas húmedas, bosques secundarios y manglares, desde el nivel del mar hasta los seiscientos metros de altitud. Generalmente se ve en grupos familiares o pequeñas bandadas, que se desplazan por el dosel, a entre treinta y cincuenta metros del suelo del bosque, en busca de las frutas que constituyen casi toda su dieta, aunque en ocasiones se alimenta también de pequeños animalillos, llegando a capturar insectos en pleno vuelo. Puede criar durante todo el año. El nido se sitúa en el agujero de un tronco de árbol, a entre ocho y quince metros del suelo. Como en casi todos los cálaos, la hembra queda encerrada dentro del agujero mediante una pared de barro, pulpa de fruta y excrementos, que ambos sexos usan como cemento para sellar la entrada al nido, el macho desde fuera y la hembra desde dentro, dejando tan sólo una pequeña abertura. Una vez encerrada, la hembra pone de uno a tres huevos blancos, que incuba ella sola mientras el macho se encarga de recolectar los alimentos y pasárselos a su compañera a través de la abertura. Los polluelos nacen dentro del nido y no salen de él hasta que su madre nota que están listos para aventurarse al exterior, momento en el cual rompe a picotazos la pared con la que tapó el nido. Normalmente un solo polluelo sale al exterior en cada nidada.