Chelifer cancroides

Chelifer cancroides (Linnaeus, 1758) Geoffroy, 1762

26-Octubre-2006.
Europa, España, Aragón, Zaragoza, Peñaflor de Gállego, Campus de Aula Dei, invernando bajo la corteza de unos viejos ejemplares de Platanus x hispanica.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Arachnida.
Orden: Pseudoscorpionida.
Suborden: Iocheirata.
Superfamilia: Cheliferoidea.
Familia: Cheliferidae.
Subfamilia: Cheliferinae.
Género: Chelifer.
Especie: Chelifer cancroides.

Los pseudoescorpiones son un pequeño orden de arácnidos así llamados por su vago parecido con los escorpiones, salvando la falta de segmentos caudales y telson (aguijón) así como la diferencia de tamaño. Esta especie, la única del género Chelifer y la primera de pseudoescorpión en ser descrita por la ciencia, es de gran tamaño en comparación con la mayoría de especies del orden, pudiendo alcanzar entre dos y medio y cuatro y medio milímetros de longitud corporal. Posee dos grandes pedipalpos de color castaño oscuro, muy alargados, de siete a nueve milímetros de longitud cuando están extendidos, y cuatro pares de patas que van aumentando progresivamente de tamaño hacia atrás. El cuerpo es aplanado y con forma de lágrima. El cefalotórax es del mismo color oscuro que los pedipalpos. Posee dos ojos, situados en los laterales del cefalotórax. Su abdomen, de color más claro, consta de doce segmentos, aunque sólo diez de ellos son visibles.

Actualmente es una especie cosmopolita, extendida por el hombre en todo el mundo, y se divide en dos subespecies. Es la especie de pseudoescorpión que tiene un área de distribución más amplia. Vive refugiado en la hojarasca o bajo piedras y cortezas, alimentándose de animalillos que capturan con las pinzas. También es frecuente en los nidos de aves, y en las viviendas humanas. Se trata de la especie más conocida de todo el orden, probablemente debido a su carácter a menudo antropófilo. Este pseudoescorpión es un aliado contra las plagas domésticas, particularmente los llamados "piojos de los libros", Liposcelis spp. Estos insectos son una de las principales fuentes de alimento de Chelifer cancroides en los casos en los que éste se encuentra en las viviendas humanas. Este animal puede caminar hacia delante, hacia atrás o incluso de lado con la misma agilidad. Para reproducirse, el macho establece un territorio de uno o dos centímetros de diámetro, en el cual frota su vientre contra el suelo, probablemente liberando feromonas, y cuando una hembra acude al lugar, el macho traza círculos alrededor de ella, con las pinzas extendidas y haciendo vibrar el cuerpo. La fecundación es externa: el macho deposita en el suelo un espermatóforo y caminando hacia atrás sobre el mismo, guía a la hembra para colocarla encima y posibilitar su recogida. Todo este proceso de apareamiento dura entre diez minutos y una hora. Una vez fecundada, la hembra pone de veinte a cuarenta huevos que lleva consigo a todas partes, adheridos a su vientre. Cuando nacen las crías, permanecen aferradas al cuerpo de su madre hasta que tienen unas dos semanas y están listas para independizarse. Tarda entre diez y veinticuatro meses desde que nace del huevo hasta que alcanza la madurez sexual, mudando tres veces durante el proceso, para mudar puede construir un refugio de seda que le protege de los depredadores en esta fase tan vulnerable. Puede vivir tres o cuatro años.

Pues de momento parece ser que este orden va a quedar con solo dos especies en el foro, puesto que las mias no las he podido determinar, aunque no esta tampoco mal para lo mal conocido que está el grupo en España.

Tengo claves para las especies de Aragón, aunque quizás las de Valencia varíen, ya que incluirán especies costeras, como los Garypidae, que no hay en Aragón.

De todos modos, puedo escribírtelas en tu correo si lo deseas.

Perfecto, a alguna especie tal vez se pueda llegar. El día que los saque para determinarlos me pondré en contacto contigo.

Añado como curiosidad un ejemplar recién mudado de esta especie, de un gris-verdoso-azulado.

Muy curioso el color. Supongo que le harías foto pensando que podría ser una especie nueva ¿no?

No, para nada, yo sabía que solo podia ser Chelifer cancroides, que es muy abundante en esa zona pero es el único pseudoescorpión que hay allí.