Chalcides ocellatus

Chalcides ocellatus (Forsskål, 1775)

5-Agosto-2008.
Cautividad. Europa, Francia, París, Jardin des Plantes, Ménagerie du Jardin des Plantes.
Leg: Isidro Martínez. Det: Jardin des Plantes.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Sauropsida.
Orden: Squamata.
Suborden: Sauria.
Superfamilia: Scincoidea.
Familia: Scincidae.
Subfamilia: Scincinae.
Género: Chalcides.
Especie: Chalcides ocellatus.

El eslizón ocelado es un gran escinco, que puede alcanzar hasta treinta centímetros de longitud. Aproximadamente la mitad de esta longitud corresponde a su cola. La cabeza está poco diferenciada del cuerpo, y en la punta del morro posee una escama rostral grande y redondeada, sus orificios nasales son grandes y los ojos quedan protegidos por párpados transparentes. De siete a nueve escamas forman la hilera supralabial, y de ellas casi siempre la quinta es la que está en contacto con el ojo. La cavidad auditiva es grande. Su piel posee unas pequeñas marcas de color blanco y negro, bastante llamativas, que le dan sus nombres común y científico. Estos ocelos blanquinegros faltan en el vientre del animal, el cual es blanquecino o amarillento, más claro que el dorso grisáceo bronceado. Las escamas del cuerpo son lisas y brillantes, sin diferenciación entre las dorsales y las ventrales. Sus patas, aunque reducidas, están bien desarrolladas, y terminan en cinco dedos cada una.

Se distribuye por la mitad norte de África (por el sur hasta Kenia) y la península Arábiga, penetrando escasamente en el sudoeste de Asia (al este hasta Pakistán) y sudeste de Europa, incluyendo muchas islas del Egeo. También existen poblaciones introducidas en Ceilán, Nápoles, el Levante español, Florida y Arizona. Habita en pedregales y zonas de matorral, desde el nivel del mar hasta los dos mil quinientos metros de altitud. Se mueve ágilmente escurriéndose entre las rocas, sin utilizar mucho sus patas. No suele asolearse, y en su lugar absorbe calor ocultándose bajo grandes piedras planas que se calientan fácilmente. Inverna enterrándose en el suelo u ocultándose en grietas profundas. Se alimenta de insectos terrestres y arañas, y también de pequeños reptiles, incluyendo sus propias crías. También puede interesarse por los alimentos vegetales, como bayas dulces. De abril a junio tiene lugar la temporada reproductiva, en la cual los machos son muy agresivos entre sí, mordiéndose las colas. Durante la cópula, el macho sujeta a la hembra mordiendo su cuello, a la manera típica de los lagartos. Tras entre uno y medio y tres meses de gestación, la hembra pare de dos a veinte crías vivas (es ovovivípara), las cuales miden al nacer unos ocho centímetros de longitud. Con dos o tres años de vida las crías alcanzan la madurez sexual.