Callimus abdominalis

Callimus abdominalis (Olivier, 1795) Mulsant, 1850
Sinónimo: Callimellum abdominale (Olivier, 1795) Plavilstshikov, 1932

2-Diciembre-2011.
Cautividad. Europa, España, Aragón, Zaragoza, en una colección particular.
Leg: Isidro Martínez. Det: Ernesto Navarro.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Coleoptera.
Suborden: Polyphaga.
Superfamilia: Chrysomeloidea.
Familia: Cerambycidae.
Subfamilia: Cerambycinae.
Género: Callimus.
Especie: Callimus abdominalis.

Este pequeño longicornio mide entre cinco y nueve milímetros de longitud corporal. El macho es totalmente de color negro con un tenue brillo metálico verdoso o azulado en los élitros. En cambio, la hembra es mucho más vivamente coloreada, destacando por su contrastado pronoto rojo y su abdomen también rojo, siendo las demás partes de su cuerpo del mismo color que las del macho, si bien los élitros presentan un color verde o azulado más intenso. Ambos sexos poseen antenas relativamente cortas, que no superan la longitud corporal, finas y de color negro. Las patas son negras y los fémures son marcadamente claviformes. Las patas y la cara ventral del cuerpo están recubiertas de largos pelos erectos blanquecinos. La hembra de esta especie se asemeja mucho por su coloración a Certallum ebulinum, pero este último posee el abdomen oscuro metalizado en lugar de rojo, sus antenas son parduzcas y presenta tubérculos prominentes en los laterales del pronoto. Otra especie similar es Callimus angulatus, en la que los dos sexos son de color uniformemente verdoso o azulado metálico, sin partes rojas, los machos de esta última especie se distinguien de los de C. abdominalis por sus patas de color verde o azul metalizado en lugar de negras.

Es endémico del sudoeste de Europa, aunque no es común en la Península Ibérica donde sólo aparece en el tercio norte en núcleos aislados. En cambio, está repartido por toda la península Itálica, Cerdeña, Croacia, el Mediterráneo francés y algunos puntos menores en otros países. Los imagos aparecen de mayo a julio, acudiendo a las flores, especialmente las de umbelíferas, majuelos, saúcos, serbales y otras plantas de floración similar. La larva se encuentra en ramas y ramillas muertas sobre árboles vivos. Es muy polífaga, aunque muestra una ligera tendencia a elegir la madera de arces y robles, y en menor grado membrilleros, espinos, carpes, cornicabras, castaños y muchas otras especies. Su ciclo vital dura dos años.