Athalia circularis

Athalia cf. circularis (Klug, 1813)

2-Octubre-2009.
Europa, España, Aragón, Zaragoza, en mi jardín, sobre un rosal.
Leg: Isidro Martínez. Det: Óscar Aguado.

Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Hymenoptera.
Suborden: Symphyta.
Superfamilia: Tenthredinoidea.
Familia: Tenthredinidae.
Subfamilia: Allantinae.
Género: Athalia.
Especie: Athalia cf. circularis.

Esta avispa portasierra mide entre cuatro y seis milímetros de longitud corporal, y posee un abdomen de color naranja brillante y un tórax negro con los costados naranjas y con una fina banda negra en la parte inferior del tórax, en la mesopleura, lo que es muy útil para diferenciar esta especie (en otras especies la mesopleura es completamente negra o completamente naranja). Sin embargo este carácter es variable y a veces hay ejemplares extremos de A. circularis con la mesopleura casi negra o completamente naranja. La cabeza es negra, con antenas negras, y las patas son naranjas con el ápice de las tibias posteriores negro. Las alas son transparentes aunque algo ahumadas y parduzcas hacia la base, y poseen la zona costal negra desde la base hasta el grueso pterostigma, también negro. Existen otras especies muy similares y difíciles de diferenciar. Especialmente similar resulta Athalia longifoliae, que sólo se diferencia por la genitalia en los machos y por la forma de los dientes del oviscapto en las hembras, así como por la planta nutricia de sus larvas.

Los imagos vuelan de mayo a septiembre y pueden verse visitando varias flores, especialmente umbelíferas, para alimentarse de su néctar. Los machos son mucho más activos que las hembras y a menudo sólo se posan por unos instantes antes de continuar su revoloteo alrededor de sus plantas nutricias. Su larva se alimenta de las hojas de diversas especies de Veronica (como V. beccabunga y V. officinalis) y de Glechoma hederacea. Inverna como larva.