Anystis baccarum

Anystis baccarum (Linnaeus, 1758).

2-Octubre-2007.
Europa, España, Aragón, Zaragoza, en mi jardín, obtenido por vareo en Prunus dulcis.
Leg: Isidro Martínez. Det: Antonio Serrano.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Arachnida.
Orden: Prostigmata.
Suborden: Anystina.
Superfamilia: Anystoidea.
Familia: Anystidae.
Subfamilia: Anystinae.
Género: Anystis.
Especie: Anystis baccarum.

Este ácaro mide hasta un milímetro y medio de diámetro corporal (excluyendo las patas), y es de color rojo oscuro. Posee dos pares de ojos. El escudo prodorsal es redondeado en su parte anterior y dentado en la posterior, y porta dos pares de largas setas y un par de sensilias. El margen anterior del idiosoma lleva otro par de sensilias. Las largas patas están densamente cubiertas de cortas setas lisas. Cada tarso termina en dos uñas y un empodio. Los palpos poseen el penúltimo segmento provisto de tres uñas y el último provisto de cuatro pequeños solenidios. Poseen también muchas setas aserradas largas, siendo la más larga la apical. Posee dos quelíceros, cada uno de los cuales está provisto de dos setas.

Se trata de una especie cosmopolita, que se puede encontrar desde Europa hasta Nueva Zelanda y desde Sudáfrica hasta Norteamérica. Esta distribución tan amplia es fruto de la introducción humana, siendo seguramente originario de Europa. Está ausente en Sudamérica y en grandes áreas de Asia. Es un ácaro depredador, y por ello bastante apreciado por los horticultores. Con gran facilidad es también caníbal, lo que dificulta sumamente su cría en cautividad. Es un ácaro muy móvil que corretea sin cesar a gran velocidad en el follaje de los árboles. No existen los machos en esta especie, que se reproduce por partenogénesis. Los huevos pueden ser vistos fácilmente a través del cuerpo de estos animales, y cuando están a punto de ponerlos, ocupan todo su cuerpo. Suelen poner unos veintidós huevos por cada puesta y unas dos puestas en su vida. Los huevos son puestos sobre superficies húmedas del suelo o la corteza, y están entretejidos mediante filamentos transparentes. Al nacer, miden dos décimas de milímetro de diámetro y sólo poseen seis patas, en lugar de las ocho patas de los adultos. Tras unos diez o quince días después de la eclosión, las larvas abandonan la cáscara del huevo, donde han permanecido inmóviles alimentándose del saco vitelino. Un mes después, tras algunas mudas, aparecen los ácaros adultos, que viven de quince a diecisiete días. Puede verse durante todo el año, teniendo al menos tres generaciones anuales.