Dinonigidius bartolozzii

Dinonigidius bartolozzii Paulsen, 2016

15-Septiembre-2021.
Cautividad. Europa, Austria, Viena, Innere Stadt, Museo de Historia Natural de Viena.
Coordenadas: 48°12′18″N, 16°21′34″E.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez (el Museo lo tenía etiquetado como Dinonigidius ahenobarbus, especie diferente largamente confundida con D. bartolozzii previamente a su descripción)


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Coleoptera.
Suborden: Polyphaga.
Superfamilia: Scarabaeoidea.
Familia: Lucanidae.
Subfamilia: Lucaninae.
Género: Dinonigidius.
Especie: Dinonigidius bartolozzii.

Éste es un pequeño ciervo volante que mide entre quince y veintiuno y medio milímetros de longitud corporal, y entre seis y siete milímetros de anchura, siendo por tanto, bastante más pequeño que la otra especie del género, D. ahenobarbus. Los machos alcanzan mayores tamaños que las hembras, no superando éstas los dieciocho milímetros y medio de longitud corporal. Su cuerpo es de color castaño brillante con la cabeza y el pronoto negros, La cabeza es brillante, con una puntuación densa y pequeña. El clípeo, de color castaño, tiene un pronunciado declive, y se estrecha entre las mandíbulas, su ápice es truncado. Las mandíbulas, de color castaño, son lo más destacable del animal, especialmente las extrañas mandíbulas del macho. Son cortas (más cortas que la cabeza), aplanadas, puntiagudas, dirigidas hacia delante. En el macho, el margen interno está provisto de tres dentículos en la mandíbula derecha y cuatro en la izquierda, en la hembra sólo hay uno o dos dentículos por el lado interno de cada mandíbula. En el macho, además, cada mandíbula está provista de un enorme cuerno bastante más largo que la propia mandíbula, dirigido hacia arriba, curvándose a la vez hacia dentro, como los cuernos de un búfalo, la hembra carece completamente de cualquier traza de proceso vertical en sus mandíbulas (a diferencia de la hembra de D. ahenobarbus que posee un leve tubérculo). Los ojos están completamente divididos en dos partes por el canto ocular. Las antenas tienen la maza pequeña, tomentosa, más corta que el escapo, y formada por los últimos tres segmentos antenales. El pronoto es corto, tan ancho como los élitros, y el macho carece de la gran callosidad frontal bifurcada que poseen los machos de D. ahenobarbus en su pronoto. Los ángulos anteriores del pronoto son emarginados. Los élitros son de lados paralelos y están esculpidos por hileras de gruesos puntos ovalados, contiguos, estas hileras están bien diferenciadas cerca de la sutura, pero se vuelven obsoletas hacia los márgenes laterales de los élitros. Las patas anteriores tienen las tibias con el ápice agudo y cinco dientes agudos en su borde externo, más pequeños cuanto más basales. Las patas medias poseen las tibias con un gran diente externo y uno o dos dientes accesorios más pequeños. Las patas posteriores poseen tibias con un pequeño diente mediano.

Es endémico de la isla de Ceilán. Dentro de esta isla, su distribución parece estar concentrada en la localidad de Kandy, de donde proceden casi todos los ejemplares conocidos, pero también ha sido observado en Elpitiya, al sur de la isla. Durante muchos años, esta especie fue confundida con Dinonigidius ahenobarbus, una especie semejante endémica de Tamil Nadu en la India, dada como la única especie de su género hasta que el estudio de los ejemplares de Ceilán reveló que se trataba de una especie bien diferenciada. No se conoce la biología de esta especie ni tampoco la de D. ahenobarbus, pero sin duda han de ser ambos escarabajos saproxilófagos, asociados a bosques naturales, cuyas larvas viven en la madera podrida, presumiblemente los adultos se alimenten de los reflujos de savia que rezuman las heridas de los troncos de árboles.