Atypus piceus

Atypus piceus (Sulzer, 1776)

15-Septiembre-2021.
Cautividad. Europa, Austria, Viena, Innere Stadt, Museo de Historia Natural de Viena.
Coordenadas: 48°12′18″N, 16°21′34″E.
Leg: Isidro Martínez. Det: Naturhistorisches Museum Wien.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Arachnida.
Orden: Araneae.
Suborden: Mygalomorphae.
Superfamilia: Atypoidea.
Familia: Atypidae.
Género: Atypus.
Especie: Atypus piceus.

Ésta es la especie tipo de las treinta y cuatro que conforman el género Atypus. Mide hasta un centímetro y medio de longitud corporal, sin incluir los prominentes quelíceros. Los machos, más pequeños que las hembras, no superan el centímetro de longitud corporal. También existe dimorfismo sexual en su coloración: los machos adultos tienen el cefalotórax castaño, marrón oscuro o negro profundo y el abdomen negro, mientras que las hembras son de un tono castaño violáceo, especialmente en el abdomen, con el cefalotórax siempre marrón oscuro. Los quelíceros son negros, brillantes, con el segmento basal muy grueso y prominente, orlado de una hilera de dientes a lo largo de su parte inferior, y la uña muy larga y afilada. Posee hileras serígenas muy largas, formadas por tres segmentos, el último de los cuales muestra una mancha clara diagnóstica de la especie. El macho posee una depresión en el fémur de los palpos, dentro de la cual asoma una cresta. El metatarso del cuarto par de patas del macho posee dos espinas dorsales. Existe la teoría de que esta especie es de origen híbrido natural entre Atypus affinis y Atypus muralis.

Se encuentra repartida por gran parte de Europa central y del sur (aunque falta en la Península Ibérica e Islas Británicas), y también se halla en Oriente Próximo, al este hasta Irán. Habita en praderas secas y pendientes con escasa vegetación, desde el nivel del mar hasta los mil doscientos metros de altitud. Vive dentro de su madriguera forrada de seda, de hasta treinta centímetros de profundidad y un centímetro y medio de diámetro, la seda se extiende como un dedo hueco de unos diez centímetros de longitud por encima de la superficie de la tierra, camuflado con restos de tierra y vegetales adheridos a su superficie. A menudo las madrigueras se encuentran formando colonias dispersas. La temporada de cría tiene lugar en junio y julio, cuando los machos vagabundean en busca de hembras, las cuales no salen fuera de sus madrigueras. Cada hembra puede poner de setenta a ciento sesenta huevos al año. Los huevos eclosionan en otoño, y las crías pasan el invierno en la madriguera materna, sin alimentarse. Cuando regresa el buen tiempo, las arañitas salen de la madriguera y trepan a la vegetación circundante donde expulsan hilos de seda para poder ser arrastradas por las corrientes de aire. Es notablemente longeva para un invertebrado de su tamaño: las hembras pueden vivir hasta diez años. A pesar del aspecto muy desarrollado de sus quelíceros, la picadura no es peligrosa para los humanos y se reduce a una sensación de escozor y enrojecimiento de la piel, siendo ambos síntomas efímeros.