Dermatobotrys saundersii

Dermatobotrys saundersii Bolus, 1890

30-Julio-2019.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, Nueva Inglaterra, Nueva York, Bronx, Jardín Botánico de Bronx.
Coordenadas: 40°51'41.91"N , 73°52'39.85"W.
Leg: Isidro Martínez. Det: Bronx Botanical Garden.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae
Filum: Spermatophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Lamiales.
Familia: Scrophulariaceae.
Subfamilia: Scrophularioideae.
Género: Dermatobotrys.
Especie: Dermatobotrys saundersii.

Esta es una muy inusual especie de escrofulariácea, única especie del género Dermatobotrys. Posee tallos leñosos, desordenados e irregulares, erectos, de hasta un metro de altura, que nacen de gruesos rizomas leñosos semejantes a un cáudex. Sus atractivas hojas tienen una textura blanda y levemente carnosa, con el margen someramente dentado y venación rojiza, y emiten una fragancia peculiar cuando son frotadas, que recuerda al olor del barniz con un toque de limón. Las hojas recién brotadas poseen un tinte rojizo o purpúreo. Es caducifolia en su hábitat natural, aunque puede comportarse como perennifolia en cultivo. Florece de forma muy prolongada, de junio a diciembre en la naturaleza. Las flores son escarlatas, tubulares, curvadas y grandes, terminando en cinco lóbulos iguales, puntiagudos. Las anteras se sitúan justo en los senos entre los lóbulos de la corola. Las flores se disponen formando verticilos alrededor de los gruesos tallos leñosos, entre las hojas o bajo ellas. Tras florecer produce frutos ovalados, lisos, de color marrón, comestibles, dulces, con sabor semejante al del higo. Contienen numerosas semillas pequeñas en una pulpa dulce.

Se distribuye por el sur de África, donde habita en los bosques costeros en terrenos escarpados, desde el sur de Zululandia hasta el Transkei así como en Madagascar. Se trata de una especie epífita, que suele verse creciendo en las horquillas de un árbol muerto en pie (más raramente en un árbol vivo). Su preferencia por este hábitat particular hizo creer al principio que se trataba de una planta parásita que mataba los árboles, pero eso es falso, simplemente aprovecha los árboles muertos ya que en ellos recibe mucha más luz. En cultivo se adapta bien a crecer en tierra, y en condiciones artificiales puede florecer todo el año. Es una planta rara en la naturaleza, no se considera una especie amenazada pero sus requerimientos ecológicos muy específicos la pueden poner en riesgo. Sus flores tubulares rojas, algo curvadas, son una clara adaptación a la polinización por aves nectarívoras (suimangas).