Ceraeochrysa lineaticornis

Ceraeochrysa lineaticornis (Fitch, 1855)

30-Julio-2019.
América, Norteamérica, Estados Unidos, Nueva Inglaterra, Nueva York, Queens.
Leg: Isidro Martínez. Det: Catherine Ann Tauber.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Neuroptera.
Suborden: Planipennia.
Superfamilia: Hemerobioidea.
Familia: Chrysopidae.
Subfamilia: Chrysopinae.
Género: Ceraeochrysa.
Especie: Ceraeochrysa lineaticornis.

Éste es un crisópido que mide unos dos centímetros y medio de envergadura alar, y unos ocho milímetros de longitud corporal. Su cuerpo es de color verde brillante. Destacan mucho en esta especie sus larguísimas antenas filiformes, de color negro, que en reposo generalmente se dirigen juntas hacia delante y que superan la longitud del cuerpo. Los gruesos y cortos escapos de las antenas son de color verde intenso, con una línea negra lateral. Los grandes ojos esféricos son de color metálico cobrizo. Las alas poseen las venas longitudinales verdes, pero las venillas transversales son en general negruzcas. Carece de verdaderos pterostigmas, pero la concentración de venas en la zona subapical de cada ala da a esta región un tinte más verdoso que en el resto del ala. La larva es de color blanquecino y de aspecto giboso. En su cabeza destaca un dibujo de dos líneas negras a cada lado, que nacen a ambos lados de cada antena, las dos líneas más internas convergen hasta casi unirse. Este dibujo cefálico permite distinguir a esta especie de otras Ceraeochrysa norteamericanas.

Se encuentra en Norteamérica oriental, desde la Columbia Británica hasta México y por el oeste hasta Texas. Es adaptable y frecuenta parques y jardines, incluso en entornos urbanos. Los imagos, de actividad nocturna, se alimentan de pequeños insectos, y con frecuencia aducen a la luz artificial. Su larva construye un refugio protector sobre su cuerpo, hecho de detritos y restos vegetales y animales, que acarrea consigo para camuflarse y protegerse de depredadores. Es la única especie conocida de Chrysopidae que usa las secreciones cerosas de las ninfas de Flatidae para construir su refugio portátil. El alimento preferido por la larva son las ninfas de hemípteros, especialmente Tingidae y Flatidae, y también diversos pulgones.