Basileuterus culicivorus

Basileuterus culicivorus (Deppe, 1830)

27-Julio-2019.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, Nueva Inglaterra, Massachusetts, Suffolk, área metropolitana de Boston, Cambridge, Campus de la Universidad de Harvard, Museo de Historia Natural de Harvard.
Leg: Isidro Martínez. Det: Harvard Museum of Natural History.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Aves.
Orden: Passeriformes.
Suborden: Oscines.
Superfamilia: Passeroidea.
Familia: Parulidae.
Género: Basileuterus.
Especie: Basileuterus culicivorus.

La reinita coronidorada es un pajarillo de doce o doce y medio centímetros de longitud, y es la especie tipo de las veintiuna que conforman el género Basileuterus. Su plumaje dorsal es de un gris oliváceo, mientras que las partes ventrales suelen ser de un tono amarillo intenso, excepto en la subespecie hypoleucus, donde son blanquecino sucio. Su cabeza está adornada por difusas bandas longitudinales: una negra que atraviesa el ojo, bordeada arriba y abajo por blanco (diluyéndose a gris en las mejillas), mientras que su coronilla consiste en dos bandas negras bordeando una fina banda central dorada. Las patas son anaranjadas claras, y el pico tiene la mandíbula superior negruzca y la inferior de color córneo.

Tiene una distribución parcheada que va desde Texas hasta el norte de Argentina, evitando los Andes, la Patagonia y la densa jungla amazónica, y se divide en trece subespecies. Habita en el sotobosque de las selvas de montaña y los linderos de bosque, a entre trescientos y dos mil ciento cincuenta metros de altitud. Suele verse en parejas o en pequeños grupos familiares. Es un majarillo activo que se mueve constantemente entre la vegetación, a entre uno y medio y dos metros del suelo, agitando las alas y meciendo la cola mientras busca insectos, principalmente pequeños escarabajos y orugas. Más raramente consume algunos frutos. Su nido es globoso, de unos catorce centímetros de diámetro, provisto de una entrada lateral, está elaborado con raicillas, fibras y tallos, y se sitúa entre la hojarasca en el suelo del bosque. Allí la hembra pone tres huevos blancos moteados de castaño, que incuba ella sola. Ambos padres cuidan de los polluelos, y si se ven sorprendidos por un depredador pueden fingir estar heridos para atraer la atención sobre ellos y alejar al peligro del nido.