Erysimum nevadense

Erysimum nevadense Reuter, 1855

31-Mayo-2014.
Europa, España, Aragón, Zaragoza, Sistema Ibérico, Campo de Daroca, Abanto, Pardos, en una cresta rocosa caliza.
Leg: Isidro Martínez. Det: Óscar Torrijo (como Erysimum mediohispanicum y como Erysimum gomezcampoi, respectivamente)


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Spermatophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Capparidales.
Familia: Brassicaceae.
Género: Erysimum.
Especie: Erysimum nevadense.

Es una planta herbácea bienal o perenne de vida corta, de escaso porte, generalmente menor de medio metro de altura, aunque su talla es muy variable y en ocasiones llega a alcanzar hasta un metro y treinta centímetros de altura. Tallos y follaje están cubiertos por una fina vellosidad. Las hojas son simples, alternas, de margen entero, las basales lineares o lanceoladas y muy abundantes, de hasta seis centímetros de longitud y tres milímetros de anchura, las caulinares mucho más pequeñas y decreciendo gradualmente conforme suben por el tallo. Cada planta da lugar a varios tallos floríferos, de hasta cuatro milímetros de diámetro en su base, culminados en racimos que contienen numerosas flores amarillas de cuatro pétalos (cada pétalo de alrededor de un centímetro y medio de longitud y cuatro milímetros de anchura), y seis estambres, dos de ellos más cortos, mientras que el estilo mide unos dos milímetros de longitud. Florece de abril a agosto. Según sus diferentes subespecies puede ser monocárpica (florece el último año y luego muere) o policárpica (que florece y fructifica en varios años). Los frutos son silicuas erectas o patentes, lineares, de hasta cuatro centímetros de longitud.

Es endémica de los sistemas montañosos de España, descrita originalmente de Sierra Nevada, a donde queda restringida si la consideramos taxonómicamente de la forma más estricta, pero extendiéndose por otros sistemas montañosos del sur y este peninsular si la consideramos en un sentido taxonómico más amplio, incluyendo a los taxones mediohispanicum, gomezcampoi, ruscinonense, rondae y mexmuelleri como subespecies de nevadense, y no como especies separadas. Crece a entre setecientos y dos mil ochocientos metros de altitud en matorrales y praderas de alta montaña y en terrenos semisombreados de roquedales, bosques y matorrales, siendo especialmente frecuente en tomillares y piornales. Evita generalmente los terrenos nitrificados, degradados y removidos que son preferidos por otras especies de crucíferas.

Subespecie mediohispanicum en Pardos:


Subespecie gomezcampoi en Javalambre: