Chrysochroa ocellata

Chrysochroa ocellata (Fabricius, 1775)

6-Agosto-2017.
Cautividad. Europa, Alemania, Renania del Norte-Westfalia, Colonia, Zoo de Colonia, en una colección de coleópteros expuesta en el Insectario.
Coordenadas: 50°57′30″N, 06°58′24″E.
Leg: Isidro Martínez. Det: Zoo de Colonia.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Coleoptera.
Suborden: Polyphaga.
Superfamilia: Buprestoidea.
Familia: Buprestidae.
Subfamilia: Chrysochroinae.
Género: Chrysochroa.
Subgénero: Pyranthe.
Especie: Chrysochroa ocellata.

El género Chrysochroa destaca por la suntuosidad de su coloración, y sería difícil elegir a la especie más hermosa del género, pero sin duda Chrysochroa ocellata sería un buen candidato. No es muy grande en comparación con otras especies del género, alcanzando hasta cuatro centímetros de longitud corporal. Posee una cabeza pequeña, de color verde metálico con la frente cobriza, fuertemente punteada, y dos grandes ojos castaños. El pronoto es trapezoidal, de color azul oscuro brillante en el centro, rojo metálico en los laterales y verde metálico entre ambos. Los élitros quedan atravesados por una banda transversal mate que va desde naranja hasta blanco cremoso y que puede ser de anchura uniforme o quedar reducida a dos manchas redondas separadas, una en cada élitro. Fuera de esta banda clara, los élitros son de color metálico, existiendo una difusa zona roja en el centro de cada zona anterior y posterior a la banda transversal clara, esta zona roja metálica está rodeada de un halo verde metálico, y de este halo a los bordes de los élitros y de la banda transversal, lo que queda es azul metálico. El ápice de los élitros es truncado, muy ligeramente bidentado. Las patas son de color verde o azul metálico. La cara ventral está cubierta de un denso tomento amarillo en gran parte de su superficie.

Este escarabajo se puede encontrar desde la India y Ceilán hasta Sumatra, dividiéndose en varias subespecies. Habita en las selvas tropicales. Se dice que esta espece es capaz de emitir una leve fosforescencia en la oscuridad, aunque mucho más tenue y difusa que la de los cocuyos o las luciérnagas. Se dice que las damas que viven en el área de distribución de esta especie mantienen ejemplares en cautividad para usarlos como decoración en la ropa en ocasiones especiales, y desde luego estos insectos son más hermosos que cualquier joya imaginable, aunque es dudoso que tal práctica beneficie a su especie.



Ejemplar de la subespecie ephippigera en Faunia, etiquetado como Chrysochroa toulgoeti: