Halichoerus grypus

Halichoerus grypus (Fabricius, 1791)

23-Julio-2017.
Cautividad. Europa, España, Madrid, Zoo-Aquarium de Madrid.
Leg: Isidro Martínez. Det: Zoo de Madrid.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Synapsida.
Orden: Carnivora.
Suborden: Pinnipedia.
Familia: Phocidae.
Género: Halichoerus.
Especie: Halichoerus grypus.

La foca gris es la única especie del género Halichoerus. Puede medir hasta dos metros y veinte centímetros de longitud y pesar hasta doscientos veinte kilos, esto en el caso de los machos, ya que las hembras son mucho más pequeñas, con hasta un metro y ochenta centímetros de longitud y ciento cincuenta kilos de peso. Es una especie muy característica por la inconfundible forma de su cabeza, con un morro alargado, levemente dirigido hacia abajo, arqueado como el pico de un buitre en los machos (de ahí el nombre de grypus, que significa buitre o grifo), mientras que es muy recto y algo más corto en las hembras. Los hombros del macho son muy abultados y suelen estar llenos de cicatrices por las peleas producidas en la época de cría. Presenta dimorfismo sexual también en la coloración. Los machos son de color gris oscuro o pardo oscuro con manchas de un gris plateado. La hembra es de color gris, plateado o pardo con pequeñas manchas negruzcas dispersas. Las tres poblaciones separadas entre sí de foca gris presentan cada una una coloración predominante: grisácea, parda o plateada, y todas ellas poseen la zona dorsal más oscura que la ventral. Al nacer, los cachorros están cubiertos de un largo pelaje uniforme de color crema y pesan unos dieciséis kilos.

Se reparte por las aguas templadas y subárticas en ambas orillas del Atlántico norte, dividiéndose en tres poblaciones bien separadas y sin intercambio genético entre ellas. La población occidental se reparte por Canadá, desde las costas del Labrador hasta Nueva Escocia. La población oriental se distribute por el sudoeste de Islandia, las islas Féroes y desde las Islas Británicas hasta Noruega y el noroeste de Rusia, en raras ocasiones alcanzando las costas francesas, suizas, alemanas y portuguesas. La tercera población es endémica del mar Báltico. Su hábitat también varía en cada colonia de focas, algunas prefieren las costas continentales rocosas y otras se sienten más a gusto en islotes solitarios, también hay muchas colonias en los icebergs y la banquisa de hielo. Las focas grises cazan bajo el agua y pasan el resto de su tiempo en la costa. Son oportunistas que consumen gran variedad de peces, y en ocasiones crustáceos y moluscos, pudiendo sumergirse hasta los setenta metros de profundidad para conseguirlos. Normalmente pescan en grupo y consumen su presa tragándola entera en el mismo lugar donde la capturan, salvo si es un pez grande, que entonces llevan hasta la superficie y sujetan con sus aletas delanteras, desechando su cabeza y cortando el resto del pez en pequeños trozos con los dientes. Sus estrategias reproductivas también varían entre las poblaciones: al parecer las colonias que crían en tierra firme son políginas (cada macho compite con otros para conseguir harenes de hasta diez hembras), mientras que las que crían sobre el hielo parecen ser monógamas. La época de cría tiene lugar desde mediados de diciembre hasta octubre dependiendo de la localidad. Las focas se alimentan activamente unos meses antes de la época de cría para adquirir reservas suficientes. Aunque las luchas entre machos por el territorio y las hembras son habituales, son mucho menos cruentas y más infrecuentes que en otras especies de focas. Las hembras paren las crías engendradas el año anterior, generalmente al día siguiente de llegar a la colonia de cría, tras una gestación de once meses, y los machos suelen copular entonces con aquellas que ya han dado a luz. Las madres cuidan y defienden activamente a sus crías mientras que los machos no participan en su cuidado. El cachorro es amamantado durante unas dos semanas y puede crecer hasta un kilo y medio al día. Una vez destetado, su madre abandona la colonia y el cachorro permanecerá en tierra alimentándose de sus reservas hasta que mude la piel y empiece a pescar en el mar. Ambos sexos son sexualmente maduros a los tres años, pero debido a la competencia con machos más grandes, los machos casi nunca consiguen copular antes de los ocho años. Los machos alcanzan su tamaño definitivo a los once años de edad y las hembras a los quince años.