Grevillea juniperina

Grevillea juniperina R. Brown, 1810

22-Abril-2012.
Cautividad. Europa, España, Aragón, Zaragoza, en venta en un vivero.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Magnoliophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Proteales.
Familia: Proteaceae.
Subfamilia: Grevilleoideae.
Género: Grevillea.
Especie: Grevillea juniperina.

Es un arbusto perennifolio de porte redondeado o extendido, densamente ramificado, que puede alcanzar hasta tres metros de altura. Posee hojas alternas aciculares, duras y punzantes, uninervias, que se asemejan a las agujas del enebro, de ahí su nombre juniperina. Se disponen densamente alrededor de las gruesas ramillas. Cada hoja mide hasta tres centímetros y medio de longitud y seis milímetros de anchura, el haz es de color verde oscuro brillante, y el envés es tomentoso, los márgenes están fuertemente recurvados. Las flores son normalmente de color rojo, pero también se dan ejemplares de flor naranja, amarilla o incluso verde. Florece durante todo el año, aunque con más intensidad en primavera, la época de floración también varía según la subespecie. Las cabezuelas florales, por lo general terminales (a veces axilares) recuerdan a una araña con las patyas extendidas. Las flores carecen de pétalos, y el cáliz tubular y finamente velloso, enrollado en espiral, cumple la función de corola. El largo pistilo arqueado, que se desenrolla en espiral, sobresale largamente de la flor y mide hasta tres centímetros y medio de longitud. Los frutos son cápsulas de alrededor de un centímetro y medio de longitud, que contienen una o dos semillas estrechamente ovaladas, finamente vellosas, de cerca de un centímetro de longitud y unos tres milímetros de anchura, con una hinchazón en el ápide y provistas de una corta ala.

Esta especie es endémica de Australia oriental, repartiéndose por el este de Nueva Gales del Sur y el sudeste de Queensland. Se divide en siete subespecies. Habita principalmente en claros de bosques de eucaliptos y otros lugares abiertos, sobre suelos aluviales o arcillosos, lo que constituye una excepción entre las Grevillea, que no suelen crecer en estos suelos. Los arbustos son regularmente destruidos por los incendios naturales (a intervalos de entre diez y quince años), y sus semillas, que aguardaban en estado latente bajo el suelo, germinan tras el estímulo del fuego. Sus flores, muy ricas en néctar, son polinizadas principalmente por chupamieles (aves nectarívoras), pero también atraen a las abejas.

Existen numerosas especies muy similares. Grevillea molyneuxii se distingue por su nervio central mucho más prominente en el envés, y Grevillea speciosa posee hojas más anchas, provistas de nervios laterales, y sus pistilos son más largos.