Dymondia margaretae

Dymondia margaretae Compton, 1953

11-Julio-2016.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, California, San Diego, cerca de Seaport Village, en un parque.
Leg: Isidro Martínez. Det: Xifa.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Spermatophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Asterales.
Familia: Asteraceae.
Subfamilia: Cichorioideae.
Género: Dymondia.
Especie: Dymondia margaretae.

Única especie del género Dymondia, ésta es una planta perenne de porte rastrero, de crecimiento rápido, que por la extensión de sus rizomas acaba formando densas alfombras tapizantes, por lo que se emplea a menudo como sustitudo del césped en áreas poco extensas. Alcanza hasta medio metro de altura en situaciones excepcionales, aunque normalmente su porte es más bajo. Los rizomas, muy ramificados, crecen a ras de suelo o justo por debajo de la superficie. Las hojas crecen en forma de roseta y son de lineares a oblanceoladas, pequeñas, rígidas y gruesas, de color verde oscuro por el haz y blanco plateado por el envés. Su margen está levemente curvado hacia arriba, y es entero o posee dos o tres dientes obtusos y someros a cada lado. Las cabezuelas florales son solitarias y sésiles, de hasta dos centímetros y medio de diámetro y de color amarillo limón. Las lígulas son femeninas y las flores del disco son hermafroditas. Puede florecer durante todo el año, aunque más a menudo lo hace en primavera y a inicios de verano. El fruto es un aquenio glabro con un vilano formado por dos filas de pelos cortos.

Es endémica de Sudáfrica, donde se trata de una especie en peligro de extinción, clasificada como Amenazada. Su área de distribución está severamente fragmentada y es muy pequeña, abarcando desde Agulhas hasta Potberg. Crece a entre ciento sesenta y doscientos metros de altitud en llanuras costeras arenosas y bien drenadas. Tanto el género como la especie están dedicadas a Miss Margaret E. Dryden-Dymond, la persona que recolectó por primera vez esta especie, en el margen de una carretera. Se realizaron varias expediciones al lugar para buscar la planta, pero no se volvió a encontrar hasta dieciséis años más tarde. Por fortuna, a pesar de su rareza en estado silvestre, esta planta se ha extendido en cultivo por todo el mundo.

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