Coprophanaeus lancifer

Coprophanaeus lancifer (Linnaeus, 1767)

4-Junio-2016.
Cautividad. Europa, España, Aragón, Zaragoza, Plaza Basilio Paraíso, Museo de Ciencias Naturales de Zaragoza. Ejemplar capturado en Calahorra.
Leg: Longinos Navás Ferrer. Det: Longinos Navás Ferrer (como Phanaeus septentrionalis).


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Coleoptera.
Suborden: Polyphaga.
Superfamilia: Scarabaeoidea.
Familia: Scarabaeidae.
Subfamilia: Phanaeinae.
Género: Coprophanaeus.
Especie: Coprophanaeus lancifer.

Es el más grande de los escarabajos peloteros sudamericanos, alcanzando de dos y medio a cinco y medio centímetros de longitud. Su apariencia es extremadamente robusta, compacta y fuerte, y el insecto posee una bellísima coloración metálica azul o púrpura (muy raramente verde). Ambos sexos poseen un gran cuerno en la cabeza, levemente curvado hacia atrás, que emplean en las luchas ritualizadas con otros de su especie por el territorio donde se hallan sus madrigueras. En la parte frontal del clípeo posee dos afilados dientes. Sus robustas patas poseen grandes dientes que le permiten excavar fácilmente. Los élitros poseen las interestrías con abultamientos longitudinales de color negro brillante, que van desapareciendo hacia la parte posterior de los élitros. El macho se puede distinguir de la hembra sólo por sus dentículos torácicos, muy robustos y de ápice truncado, y la protuberancia situada entre ellos muy alta, abierta verticalmente, con los lóbulos unidos por una quilla doble de ápice dentado. En cambio, la hembra posee los lóbulos torácicos muy poco desarrollados y sin dentículos laterales.

Es una especie ampliamente extendida por toda la cuencia del Amazonas, donde se alimenta preferentemente de carroña de animales vertebrados en lugar de alimentarse de excrementos como la mayoría de Scarabaeidae. Con los dos dientes del clípeo se ayuda para cortar fragmentos de carne en descomposición y formar perfectas esferas que serán el alimento de sus larvas. Excava su madriguera justo debajo del cadáver, y en ella se desarrollarán las larvas de este animal. Este escarabajo es tan fuerte que no es posible mantener un ejemplar vivo dentro de tu mano: excavando con sus robustas patas espinosas consigue separar los dedos y recuperar la libertad.