Alphitobius diaperinus

Alphitobius diaperinus (Panzer, 1797)

26-Diciembre-2015.
Cautividad. Europa, España, Aragón, Zaragoza, Plaza Basilio Paraíso, Museo de Ciencias Naturales de Zaragoza. Ejemplar capturado en Tudela (Navarra) en 1902.
Leg: Longinos Navás Ferrer. Det: Longinos Navás Ferrer.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Coleoptera.
Suborden: Polyphaga.
Superfamilia: Tenebrionoidea.
Familia: Tenebrionidae.
Subfamilia: Tenebrioninae.
Género: Alphitobius.
Especie: Alphitobius diaperinus.

Este pequeño escarabajo mide aproximadamente unos seis milímetros de longitud corporal, posee una forma anchamente ovalada y es de color pardo a negro brillante, con élitros castaño rojizos, siendo la coloración variable tanto entre diferentes individuos como a lo largo del tiempo en el mismo individuo. Los élitros poseen costillas someras pero bien visibles. Gran parte de la superficie de su exoesqueleto está finamente esculpida con pequeños puntos. Las antenas son más pálidas en sus ápices, y están cubiertas por diminutos pelos amarillentos. La larva es similar a la de otros tenebriónidos y mide hasta un centímetro de longitud. Los huevos son estrechos, de un milímetro y medio de longitud.

Es probablemente originario del África subsahariana, pero actualmente se ha extendido por todo el mundo. Es de actividad nocturna, tanto en su fase adulta como en la fase larvaria. En el medio natural ocupa lugares cálidos y abrigados con abundante humedad y elevado aporte de materia orgánica, tales como cuevas, madrigueras de mamíferos y nidos de aves. No puede sobrevivir al exterior todo el año en las regiones de climas fríos, pero es muy abundante en las construcciones humanas termorreguladas y cálidas, y muy especialmente, en las granjas avícolas, donde se alimenta de restos de pienso, excrementos, plumas, hongos y las aves muertas. Ocasiona graves daños a las instalaciones avícolas por ser vector de numerosas enfermedades de las aves (hasta treinta diferentes) y también por que sus larvas pueden deteriorar las estructuras de madera o de poliestireno cuando excavan un refugio para pupar. También puede encontrarse con facilidad en lugares de almacenamiento de cereales, donde se alimenta no sólo de éstos sino sobretodo de los huevos y larvas de otros insectos. Es muy habitual que devoren a los de su propia especie, incluso estando vivos. La hembra fecundada pone normalmente entre dos y cuatro centenares de huevos, de forma aislada a lo largo de su vida, que como adulto dura hasta un máximo de dos años. Al cabo de una semana de la puesta, los huevos eclosionan dando lugar a larvas que tardan entre cuarenta y cien días en transformarse en crisálidas. A pesar de su potencial dañino, el hombre también encuentra utilidad a este escarabajo: es usado junto con los Dermestes en museos de historia natural para limpiar los restos orgánicos de los esqueletos, y los aficionados a la terrariofilia lo crían como alimento para reptiles y anfibios.