Attelabus nitens

Attelabus nitens Scopoli, 1763

17-Mayo-2009.
Europa, España, Aragón, Huesca, Prepirineos, Las Peñas de Riglos, Santa María - La Peña.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Coleoptera.
Suborden: Polyphaga.
Superfamilia: Curculionoidea.
Familia: Attelabidae.
Subfamilia: Attelabinae.
Género: Attelabus.
Especie: Attelabus nitens.

Este rechoncho gorgojo de color rojo es la especie tipo de las casi un centenar que componen el género Attelabus, y por tanto, de toda la familia Attelabidae. Los machos miden unos cuatro o cinco milímetros de longitud, y las hembras son más grandes, con entre seis y ocho milímetros de longitud. Presenta un cuerpo redondeado y muy convexo. La cabeza es negra, prolongada hacia delante en un rostro relativamente corto pero muy robusto, dilatado en el ápice, del cual nacen las antenas también negras, que no son acodadas y que terminan en una maza engrosada formada por tres segmentos más largos que los restantes. Los ojos son prominentes. El pronoto y los élitros son de vivo color escarlata, pero el escutelo es negro, grande y subcuadrado. El pronoto es muy convexo y carece de márgenes laterales, el borde posterior es recto. Los élitros son mucho más anchos en su base que el pronoto y su mayor anchura está al nivel del callo humeral, poseen hileras de puntos someros y bien marcados. Las patas son negras y robustas, con todos los fémures engrosados en su parte media, y las tibias denticuladas por su cara interna. Los machos poseen un solo diente en el ápice de las tibias, por su cara interna, mientras que las hembras poseen dos. La cara ventral del animal es negra brillante.

Se distribuye ampliamente por Europa y Asia. Habita en parques, jardines, bosques y setos, donde los imagos pueden observarse de mayo a julio. Se alimenta de hojas de Quercus, ya sean perennifolios (encinas) o caducifolios (robles), en raras ocasiones puede encontrarse sobre otras Fagales, como el abedul (Betula spp.) y el haya (Fagus sylvatica). Prefiere los robles jóvenes, donde suele encontrarse formando colonias. En estos árboles, las hembras fecundadas cortan la lámina de una hoja desde ambos bordes hasta cerca del nervio central, por donde la hoja queda sujeta. Acto seguido, comienzan a enrollar la hoja por el anverso, depositando a mitad de trabajo un solo huevo, redondeado y amarillo, en el borde de la hoja, y luego terminan de enrollar la hoja hasta formar un canutillo colgante. La larva resultante se alimentará del canutillo hasta que sea lo bastante madura para pupar, acto que tendrá lugar en el suelo, entre la hojarasca.