Erpeton tentaculatum

Erpeton tentaculatum Lacépède, 1800

16-Septiembre-2021.
Cautividad. Europa, Austria, Viena, Parque del Palacio de Schönbrunn, Tiergarten Schönbrunn.
Coordenadas: 48°10′56″N, 16°18′09″E.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Reptilia.
Orden: Squamata.
Suborden: Ophidia.
Familia: Colubridae.
Subfamilia: Homalopsinae.
Género: Erpeton.
Especie: Erpeton tentaculatum.

Es una curiosísima especie de serpiente, única especie del género Erpeton. Mide entre cincuenta y noventa centímetros de longitud. Su característica más destacable son los dos tentáculos que emergen de su hocico y se dirigen hacia delante. Ninguna otra serpiente del mundo posee unos apéndices semejantes, lo que hace de ésta la serpiente más fácilmente reconocible del mundo. La coloración de este animal es algo variable, habiendo dos morfotipos cromáticos: uno a bandas transversales claras y otro moteado irregularmente, en ambos casos sobre un fondo de gris oscuro a pardo bronceado. A menudo su piel adquiere un tinte verdoso por las algas filamentosas simbióticas que viven sobre ella. Al nivel medio del cuerpo, posee de treinta y cuatro a treinta y nueve hileras de escamas, fuertemente aquilladas. Las escamas ventrales son muy estrechas, con quillas a cada lado. Los ojos son pequeños, de color marrón claro, con pupilas pequeñas y redondas. Es una serpiente opistoglifa, con colmillos pequeños y sólo parcialmente acanalados.

Es originaria del sudeste de Asia, repartiéndose entre Tailandia, Camboya y Vietnam. Es una serpiente absolutamente acuática, que raramente sale fuera del agua, aunque puede enterrarse en el fango de la orilla durante la noche, o si los cuerpos de agua en los que vive se evaporan. Por lo general, tan sólo asoma su cabeza en la superficie del agua para respirar, pudiendo pasar intervalos de hasta media hora entre cada toma de aire. Es muy adaptable de modo que puede vivir en agua dulce, salobre o incluso en el mar. Prefiere las aguas turbias, con abundancia de vegetación acuática y ramas sumergidas. La serpiente pasa su tiempo estática en el agua, en posición normalmente inclinada, semejando ser una más de las ramas sumergidas, y sujetándose con la cola. Se alimenta exclusivamente de peces, a los que captura cuando pasan desprevenidos cerca de su cabeza, cuyos tentáculos disimulan su forma. Estos tentáculos poseen además órganos sensoriales con los que detecta mejor a sus presas. Es incluso capaz de anticiparse a los movimientos de huida y la dirección de escape que van a tomar los peces ante su ataque, y capturarlos dirigiéndose al punto por donde van a pasar en su huida. La serpiente de tentáculos ni siquiera necesita salir del agua para reproducirse, ya que es ovovivípara y sus crías nacen en el agua.