Anodorhynchus leari

Anodorhynchus leari Bonaparte, 1856

14-Agosto-2013.
Cautividad. Europa, República Checa, Praga, Zoo de Praga.
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Chordata.
Clase: Aves.
Orden: Psittaciformes.
Familia: Psittacidae.
Subfamilia: Arinae.
Género: Anodorhynchus.
Especie: Anodorhynchus leari.


El guacamayo índigo, añil o de Lear es una de las dos especies vivientes del género Anodorhynchus, a las que se suma una tercera especie extinta hace relativamente poco tiempo. Mide hasta setenta y cinco centímetros de longitud desde el pico a la punta de la larga cola, y su plumaje es totalmente de color azul, con el pico negruzco y las patas grises, y con unas áreas desnudas de plumas alrededor del ojo y en la base de la mandíbula inferior, mostrando la piel amarilla. Es muy similar al popular guacamayo jacinto (Anodorhynchus hyacinthinus), pero de talla menor, pico no tan afilado, cabeza con un tono más grisáceo, y el área desnuda de plumas de color amarillo que hay en la base de la mandíbula inferior no forma una banda estrecha sino un parche redondeado. Además, estas zonas amarillas en la base del pico y alrededor del ojo son de un tono mucho más pálido que en el guacamayo jacinto.

Es endémico de una minúscula zona en el nordeste del estado de Bahía, al este de Brasil, donde forma dos subpoblaciones cercanas pero aisladas, una en Toca Velha y la otra en Serra Branca. Pasó un siglo y medio entre su descubrimiento como especie y su redescubrimiento en libertad, antes del cual se ignoraba dónde vivía. Esto nos da una idea de su escasez. Solo después de su redescubrimiento se le clasificó como una especie diferente y no como una subespecie del guacamayo jacinto, como se creía hasta entonces. Habita en la jungla seca de Caatinga y sobre todo, en los palmerales salvajes, ya que las semillas de palmeras (sobre todo del género Syagrus) constituyen su principal alimento. También comen otros tipos de nueces duras y con cáscara, y en mucho menor grado, frutas y flores. Es un ave sociable e inteligente, que vive en bandadas. Cuando están buscando un nuevo terreno de alimentación o de reproducción, una cuadrilla de machos se adelanta para explorar el terreno y, si éste es seguro, vuelve a donde está el resto de la bandada para guiarla hasta allí. Si hay peligro, emiten un sonoro reclamo que da a entender a sus compañeros que conviene alejarse de allí. El nido es un agujero excavado en un talud de arenisca. De diciembre a mayo, excavan el nido con su pico y expulsan la tierra con las patas. Pone solamente uno o dos huevos. Los subadultos se emparejan varios años antes de poder procrear.

El guacamayo índigo está en grave peligro de extinción. La destrucción masiva de las junglas donde habita (especialmente debido a la creación de pasturajes para el ganado, y también por los incendios) continúa aumentando, y además esta especie ha sufrido la caza directa, para alimentación y uso de sus plumas como ornamento en el caso de las tribus nativas indígenas, y para el comercio de mascotas en el caso de los occidentales. En ocasiones incluso llega a ser perseguido por los granjeros por alimentarse de maíz cuando las semillas de palmeras escasean. En 1983 sufrió su mínimo de tan solo sesenta aves, una cifra muy crítica. Afortunadamente, esta especie ha llamado la atención de todo tipo de organizaciones conservacionistas, y se han llevado a cabo intensos programas de protección de la especie y del hábitat así como programas de cría en cautividad, gracias a todo ello la población asciende en la actualidad a más de mil ejemplares. En 2009 se consiguió que bajase de la categoría "En peligro crítico de extinción" a "Amenazado".