Cleome monophylla

Cleome monophylla Linnaeus, 1753

14-Septiembre-2021.
Cautividad. Europa, Austria, Viena, Parque Belvedere, Jardín Botánico de la Universidad de Viena.
Coordenadas: 48°11′30″N, 16°23′02″E.
Leg: Isidro Martínez. Det: Botánico de Viena.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae
Filum: Spermatophyta.
Clase: Magnoliopsida.
Orden: Capparidales.
Familia: Capparidaceae.
Subfamilia: Cleomoideae.
Género: Cleome.
Especie: Cleome monophylla.

Es una planta anual, de porte erecto o extendido, que puede alcanzar hasta un metro de altura. Sus tallos están cubiertos de pelos cortos glandulares, entremezclados con pelos más largos no glandulares. Es muy fácil de reconocer debido a sus hojas simples, en lugar de palmeadas como las de las demás especies del género. Son alternas, con un peciolo de hasta dos centímetros y medio de longitud y un limbo lanceolado u oblongo de entre uno y medio y siete centímetros de longitud y de entre medio y tres centímetros de anchura. Su margen es entero, y ambas caras de la hoja son pubescentes. La inflorescencia es un racimo terminal erecto, formado por escasas flores pequeñas, tetrámeras, cada una sobre un pedúnculo de hasta un centímetro de longitud. Los cuatro pétalos se dirigen hacia arriba, son obovados y de color blanco a púrpura. Los cinco o seis estambres, con filamentos de cinco o seis milímetros de longitud, sobresalen notablemente de la corola. El ovario tiene un estilo más corto que los estambres, rematado en un estigma capitado. La infrutescencia tiene un eje de hasta treinta y cinco centímetros de longitud, del que salen los frutos: cápsulas ahusadas péndulas, de hasta nueve centímetros de longitud y tres milímetros de diámetro, sobre pedúnculos de hasta cuatro milímetros de longitud. Las cápsulas, densamente pubescentes, se abren por completo en dos valvas al madurar, liberando semillas de color marrón oscuro, de hasta dos milímetros de diámetro, provistas de finas crestas y estrías.

Se distribuye ampliamente por África tropical, desde Mauritania hasta Somalia y por el sur hasta Sudáfrica, incluyendo Madagascar y otras islas del Océano Índico, y también en la Península Arábiga y el sur de Asia hasta la India y Ceilán. Habita en campos y páramos, bosques caducifolios, matorrales, orillas de lagos y terrenos perturbados, a entre treinta y dos mil cien metros de altitud. Sus hojas, aunque tienen un gusto y un olor desagradables y se consideran como ligeramente tóxicas, son consumidas con frecuencia en África, una vez cocinadas. Las semillas, de gusto acre, son usadas a veces como sustituto de la mostaza. Las plantas utilizadas para el consumo local no son cultivadas, sino que sus productos se cosechan del medio natural, probablemente debido a que sólo es usada si no hay mejores verduras disponibles.