Anodontoides ferussacianus

Anodontoides ferussacianus (Lea, 1834)

1-Agosto-2019.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, Nueva Inglaterra, Nueva York, Manhattan, Museo Americano de Historia Natural, pasillo anejo a la Gran Galería.
Leg: Isidro Martínez. Det: American Museum of Natural History.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Mollusca.
Clase: Bivalvia.
Orden: Unionoida.
Superfamilia: Unionoidea.
Familia: Unionidae.
Subfamilia: Unioninae.
Género: Anodontoides.
Especie: Anodontoides ferussacianus.

Esta almeja de agua dulce no es muy grande, alcanzando como máximo siete centímetros y medio de longitud. Sus valvas son elípticas alargadas, infladas y finas. El extremo anterior es redondeado y el posterior es romo. El margen dorsal es recto o apenas curvado, y el el margen ventral es variable, pudiendo ser levemente redondeado o un poco arqueado y casi siempre hendido en su mitad por una pequeña escotadura. Las valvas están cubiertas por un perióstraco de color pardo amarillento, a veces verdoso, con los picos más claros. A menudo bandas radiales verdosas aparecen en los ejemplares juveniles. La coloración tiende a hacerse más oscura y parduzca en los ejemplares viejos. Los umbos son distintivamente bajos y aplanados, elevados únicamente sobre la línea de la charnela. La escultura del pico contiene tres o cuatro crestas muy finas con forma de V. En la charnela, ambas valvas carecen de dientes pero poseen en su lugar hinchazones irregulares. La cavidad del pico es somera. El interior de las valvas es plateado o blanco azulado, con iridescencia en el extremo posterior.

Es una especie propia del nordeste de Norteamérica, que se encuentra en los tramos medio y superior del Río Mississippi, en el Río de San Lorenzo, en los Grandes Lagos y en las cuencas de los ríos Albany, Nelson y Ottawa en Canadá. Por el sur alcanza hasta Tennessee y Arkansas, por el oeste hasta Colorado y por el norte hasta Manitoba. Habita principalmente en arroyos y en pequeños ríos, generalmente en la cabecera de los mismos, sobre sustratos limosos o arenosos. Las hembras incuban sus huevos en el marsupio durante hasta once meses, y allí se transforman en larvas llamadas gloquidios, que son liberadas en la columna de agua. Los gloquidios deben encontrar un pez hospedador al que parasitar. Una vez se han desarrollado lo suficiente, los gloquidios se transforman en pequeñas almejas, y se dejan caer del pez para comenzar su vida adulta. Esta especie no es selectiva con el pez hospedador, pudiendo parasitar a una gran variedad de especies.