Achroblatta luteola

Achroblatta luteola (Blanchard, 1843)

27-Julio-2019.
Cautividad. América, Norteamérica, Estados Unidos, Nueva Inglaterra, Massachusetts, Suffolk, área metropolitana de Boston, Cambridge, Campus de la Universidad de Harvard, Museo de Historia Natural de Harvard.
Ejemplar capturado el 6 de mayo de 1976 en la isla de Barro Colorado (Panamá) por Silberglied/Aiello.
Leg: Isidro Martínez. Det: Harvard Museum of Natural History.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Animalia.
Filum: Arthropoda.
Clase: Insecta.
Orden: Dictyoptera.
Suborden: Blattodea.
Superfamilia: Blaberoidea.
Familia: Blaberidae.
Subfamilia: Panchlorinae.
Género: Achroblatta.
Especie: Achroblatta luteola.

Ésta es la única especie del género Achroblatta. Es una bonita cucaracha, que mide hasta dos centímetros y medio de longitud en el caso de las hembras (los machos no superan los dos centímetros de longitud). La longitud corporal, sin incluir las alas, es considerablemente menor que la longitud total: de dos centímetros en las hembras y menos de un centímetro y medio en los machos. Posee una cabeza triangular de color oscuro, de la que nacen dos antenas filiformes de color oscuro con la parte central de un contrastado color crema. El pronoto es transverso, brillante y de colores claros, con dos difusas marcas oscuras en el centro. Las alas anteriores son de color pajizo claro con grandes y difusas marcas grises que forman un dibujo característico de la especie. Las alas posteriores son transparentes, con el ápice ennegrecido y la zona costal amarillenta. El abdomen, por su cara superior, es oscuro, con amplios márgenes cremosos y una estrecha banda longitudinal mediana cremosa, la cara ventral del abdomen es amarillenta. Las patas son amarillentas, con el extremo de las tibias de un contrastado color negro y tarsos anillados de negro.

Se distribuye ampliamente por Centroamérica y el norte de Sudamérica, desde el sur de México hasta Bolivia. Su biología es generalista y similar a la de casi todas las cucarachas: vive en las junglas tropicales húmedas, refugiándose entre la hojarasca durante el día, y por la noche sale para consumir restos animales y vegetales. El dato más interesante sobre esta cucaracha es que, por su patrón de coloración, posiblemente imita a ciertas luciérnagas venenosas, al igual que lo hacen las polillas Endobrachys revocans y Cratoplastis diluta. Se trata, por tanto, de un ejemplo de mimetismo batesiano.