Caulerpa taxifolia

Caulerpa taxifolia (M. Vahl, 1802) C. Agardh, 1817

4-Agosto-2017.
Cautividad. Europa, Alemania, Renania del norte-Westfalia, región de Düsseldorf, Duisburgo, Bosque Urbano de Duisburgo, Zoo de Duisburgo.
Coordenadas: 51°26′07″N, 6°48′19″E
Leg: Isidro Martínez. Det: Isidro Martínez.


Dominio: Eukaryota.
Reino: Plantae.
Filum: Chlorophyta.
Clase: Ulvophyceae.
Orden: Bryopsidales.
Familia: Caulerpaceae.
Género: Caulerpa.
Especie: Caulerpa taxifolia.

Las algas del género Caulerpa son inusuales algas grandes, pero formadas por una sola célula gigante y multinucleada. Tienen algunas de las formas más sorprendentes entre las algas, cada especie poseyendo una forma particular como cintas, peines, globos o series de diminutos parasoles, por ejemplo. Posiblemente la especie más conocida mundialmente sea la aquí presente, Caulerpa taxifolia. Esta alga forma un entramado de largos y finos estolones rastreros, de los cuales emergen sus frondes erectos, planos, de entre tres centímetros y casi tres metros de longitud dependiendo de la profundidad a la que crezcan (son más largos en aguas más profundas). Cada fronde consiste en un eje central de unos siete milímetros de longitud, del que salen a cada lado sendas hileras muy planas y ordenadas de pínulas rígidas, planas y agudas, de alrededor de un centímetro de longitud, densamente dispuestas de un modo que recuerda a las acículas de un tejo (Taxus baccata), de ahí el nombre de taxifolia, que significa con hojas de tejo. No obstante las pínulas del alga son mucho más regulares y ordenadas que las acículas del árbol. Es un alga dioica, y durante la reproducción sexual, los gametos de ambos sexos se unen para formar un zigoto que experimenta varias transformaciones antes de iniciar su vida como una nueva alga. Sin embargo, esta especie no necesita en absoluto de la reproducción sexual, y se reproduce más fácilmente por fragmentación de los estolones.

En su origen, esta era un alga tropical, propia de los océanos Atlántico, Índico y Pacífico, de requisitos bastante delicados, que suele crecer a entre cinco y quince metros de profundidad (hasta cien metros si las aguas son prístinas), preferentemente en aguas contaminadas y eutrofizadas, muy ricas en oxígeno y en dióxido de carbono, con escasas variaciones de temperatura y de salinidad, y abundantes horas de intensa insolación. Allí forma pequeñas colonias dispersas. Sorprende pues que un alga tan exigente pueda ser invasiva en condiciones diferentes a las de su hábitat original, pero es precisamente su extrema capacidad invasiva en el Mediterráneo, donde no es nativa, lo que ha hecho más famosa a esta especie. El alga fue importada como una curiosidad exótica desde otros acuarios europeos al Museo Oceanográfico de Mónaco, el cual es tristemente famoso a causa de su papel en esta invasión. El personal del Museo, en 1984, limpió sus acuarios y tiró los restos al mar. El alga había sufrido ciertas mutaciones en los acuarios europeos, debido a los productos químicos empleados en acuariofilia y a la luz ultravioleta con la que se iluminaban los tanques. Estas mutaciones habían hecho de esta delicada especie un alga nueva, más grande y robusta que la original, mucho más resistente a las variables ambientales, y también mucho más tóxica. En pocos años, las costas de todo el Mediterráneo se vieron invadidas por esta alga exótica, que ningún animal nativo podía controlar debido a su toxicidad, y aquellos que la ramonean mueren, la salema (Sarpa salpa) es el único pez que al parecer es inmune a su veneno. Allí donde aparece la Caulerpa, desaparecen todos los organismos animales y vegetales sésiles nativos, y el principal ecosistema afectado son los santuarios de la biodiversidad que suponen las praderas de fanerógamas marinas, sobre todo de Posidonia oceanica, una planta milenaria de la que dependen infinitas criaturas del Mediterráneo. La aparición de la Caulerpa taxifolia ha hecho que ahora la Posidonia esté en peligro de extinción. Los ejemplares que han invadido el Mediterráneo son todos clones masculinos, por lo que aquí el alga no se reproduce sexualmente.

En un tanque del zoo de Duisburgo:


En un tanque marino de una tienda de mascotas:

Esta la vi en su ambiente natural en el Caribe, pero por lo que he visto, no recolecté ninguna muestra.